MÉNDEZ ÁLVAREZ, EL HUMORISTA EXCESIVO
DIONISIO PLATEL

Resumen / Abstract:
Primer repaso historiográfico a la trayectoria del autor Méndez Álvarez, que arroja luz sobre su natalicio, su prolífica labor profesional y su fallecimiento, hasta este momento ignotos. / First ever historical and graphic analysis of his work. New research and findings on his birthdate, his extensive professional work, and passing.
Palabras clave / Keywords:
TBO, Méndez Álvarez/ TBO, Méndez Álvarez

Méndez Álvarez puede considerarse un autor maldito, pero un autor maldito en el siglo XXI, porque durante toda su carrera profesional fue un profesional conocidísimo, apreciado y buscado. ¿Que por qué, a día de hoy, es un autor maldito? Pues por su forma insólita de dibujar, con ese estilo grotesco tan característico, por sus chistes anticlericales y antifascistas y sobre todo por una leyenda en la que se afirma que fue fusilado en 1939, al concluir la guerra civil. Sí que es cierto que su manera de dibujar se salió de la norma estilística de su época, sí que fue autor de muchísimos chistes en los que se mofaba de curas, monjas y frailes, así como de politiquillos de derechas, pero sin ninguna prueba fidedigna es muy ligero y demasiado imprudente afirmar que murió en un paredón a causa de la represión franquista. Otro tema tratado de manera superficial por historiadores de la historieta es su nombre de pila y su procedencia, todo ello lo iremos desmigando en este artículo para que pueda servir de referente para futuras investigaciones. Pero vayamos desde el principio.

 

     

Autocaricatura de Méndez Álvarez aparecida en Madrid Cómico nº 49 (7-XII-1901).
     

Gaspar Anselmo Méndez Álvarez nació en Granada, fue el quinto de los seis hijos nacidos del matrimonio de Gaspar Méndez Solves con María Álvarez Pérez y fue bautizado en la iglesia de San Matías el 25 de mayo de 1875. Su hermano mayor, Miguel (con el que le confunden algunos historiadores) nació también en Granada en 1861 y fue un conocido periodista, autor festivo e inquieto director de varias publicaciones literarias como El Álbum Literario (Granada, 1880); El Albaicín, periódico literario y festivo del que aparecieron seis números, (Granada, 1881);  El Telón, periódico festivo impreso en Granada en la imprenta de López Guevara entre 1881-1884, publicación por la que tuvo un pleito en abril de 1883 con el ayuntamiento de Granada, por injurias vertidas en ella; o los periódicos políticos semanales La Lechuga (Madrid, 1890) y Madrid Festivo (Madrid, 1892).

 

Por su carácter levantisco y republicano, Miguel Méndez Álvarez se granjeó no pocas enemistades y tuvo algunos altercados con la ley. En octubre de 1885 es director de La Revolución, periódico de Valladolid, en el que apareció un artículo por el que fue denunciado y dictado auto de prisión por injurias a los Ministros de la Corona. Un año más tarde, en la misma ciudad, fue detenido junto al también periodista Liborio García Tapia, como autores de los escritos publicados en el segundo número del semanario satírico La Barricada. El fiscal pidió para cada uno de los procesados ocho años de presidio, la condena no se hizo efectiva. En diciembre 1892 fue detenido en Madrid por arrojar piedras a los escaparates de algunas tiendas que no habían secundado una huelga. Pero asimismo fue colaborador literario escribiendo relatos y poesías para varias publicaciones: como el diario El Constitucional (Gerona, 1881); La Ilustración Ibérica (Barcelona, 1884); La Provincia (Salamanca, 1891); Diario de Gerona (Gerona, 1891); El Independiente (Orihuela, 1892); o Heraldo de Gerona (Gerona, 1908). Como redactor trabajó en el periódico madrileño La Correspondencia de España desde 1891 hasta su fallecimiento en 1910, publicación en la que también publicó relatos.

Miguel Méndez fue autor de varias obras de teatro, una de las primeras y más conocidas se tituló “La Torre del Adulterio”, un poema dramático en un acto, dividido en dos cuadros. Su libreto se publicó en Granada en 1879. En 1883 vieron la luz los libretos de “El loco, de locos habla” y “Tragedia y melodía”. Durante estos años fue representada en el teatro Principal de Granada “En el crimen la expiación”. Y ya en enero de 1901 se estrenó en el Teatro Moderno de Madrid el cuento lírico “La Bandera Blanca”, cuya música fue compuesta por el maestro Badía.

Miguel Méndez Álvarez se casó en Valladolid con la escritora feminista vallisoletana Nicolasa Durán de las Heras, colaboradora de la publicación dirigida por Concepción Gimeno de Flaquer, Álbum Ibero-Americano. Tras su muerte, el 24 de diciembre de 1910, apareció en La Correspondencia de España la siguiente nota necrológica:

Ha fallecido en esta corte el aplaudido autor de las zarzuelas "Patria y bandera" y "La prueba del delito", D. Miguel Méndez Álvarez hermano del popular dibujante que lleva el mismo apellido. El Sr. Méndez era de Granada, tenia cuarenta y nueve años, y había sido director de varios periódicos y redactor de LA CORRESPONDENCIA DE ESPAÑA, "El Demócrata", "Blanco y Negro", "Nuevo Mundo", y otros de Barcelona y Valladolid. Descanse en paz nuestro compañero, y reciba nuestro pésame su afligida familia.

Los otros hermanos de Gaspar fueron: María Méndez Álvarez (Granada, 1863 – Tarragona, 1936); Enrique Méndez Álvarez (Granada, 1868 – Tarragona ¿?), que llegó a ser Jefe de Negociado de la sección de Fomento de la Jefatura de Obras Públicas de Tarragona, dedicando 38 años al servicio del Estado, siendo muy querido y reconocido por su trabajo en bien del público; de Luisa Méndez Álvarez (Granada, 1872 –¿?), hermana mayor de Gaspar, poco hemos logrado averiguar, únicamente que se casó con Manuel López-Bago, militar e ingeniero de caminos que fue destinado a Filipinas y que a su regreso a España, después de la guerra, entró a trabajar en un puesto del Gobierno relacionado con ferrocarriles, residiendo primero en Reus y después en Barcelona. Gaspar tuvo una hermana menor, Elena Méndez Álvarez, que en  marzo de 1908 contrajo matrimonio en Tarragona con Miguel Méndez Bringa (Madrid, 1858 – Tarragona, 1931), oficial del Cuerpo de Penales y hermano del famoso dibujante Narciso Méndez Bringa.

     
 
Blanco y Negro, 22-IX-1894
       
El Noticiero de Soria, 20-V-1896.

Su padre, Gaspar Méndez Solves, fue abogado y funcionario del estado, ejerciendo diversos cargos dentro del Ministerio de Hacienda, primero en Granada y después en Soria, ciudad a la que se mudó el matrimonio Méndez Álvarez con sus hijos menores en 1894. Gaspar contaba por entonces 19 años y ya había hecho sus pinitos como caricaturista en publicaciones como Fígaro Ilustrado y Oro y Azul. En septiembre de ese mismo año ilustró un cuento de su hermano Miguel titulado “Un cólico de faroles” en la revista madrileña Blanco y Negro, que es su primer trabajo publicado conocido a día de hoy.

En Soria, el joven Gaspar se introdujo rápidamente en el ámbito cultural de la ciudad y formó parte de un selecto grupo de teatro aficionado. Durante 1896 y 1897 en el Teatro del Círculo Soriano y en el Salón Teatro del Casino de Numancia, Gaspar intervino como actor en varias representaciones: en la comedia “El tanto por ciento” de Abelardo López de Ayala o en “Militares y paisanos”. El 30 de mayo de 1896 en El Noticiero de Soria se podía leer la siguiente reseña: «En el Casino de Numancia representando al asistente en la obra “El bigote rubio”, comedia de Ramos Carrión, Gaspar Méndez hizo un andaluz muy propio. ¡Claro! Como que es natural de Granada. ¡Lástima grande que su papel fuera tan corto!».

Pero la afición mayor de Gaspar era el dibujo, la caricatura y también la pintura. En el Teatro del Círculo Soriano, en abril de 1896, fueron colocados dos grandes lienzos en las partes laterales de la embocadura: el primero una alegoría de la comedia, representada por una matrona que tiene al lado izquierdo un angelito sosteniendo un libro, viéndose en el pedestal los atributos de la misma; el segundo una alegoría de la zarzuela personificada por un ángel que lleva en la mano derecha la trompeta de la fama y sostiene con la izquierda, apoyado en su pecho, el escudo de Soria. El ángel sustentado por otros dos, tiene a sus pies los atributos de la zarzuela. Con estos lienzos Méndez obtuvo muchos elogios y merecida fama.

       
   Ilustración para Miscelánea, de 1900.      Ilustración para Fiestas de San Juan, de 1901.  


En mayo de 1896 comenzó a colaborar en El Noticiero de Soria, ilustrando el relato “El segundo, no abusar”, del escritor de esa localidad Manuel García Vinuesa, dentro de la sección Notas Ciclistas. En este periódico además utilizó la firma EMEGEA. Al mes siguiente apareció el primer número de la revista cómico seria Fiestas de San Juan. Los textos fueron de Manuel García Vinuesa y los dibujos y caricaturas de Gaspar Méndez que ilustró con profusión toda la revista. En ella además apareció una autocaricatura de Méndez. 

En la primavera de 1897 Gaspar se ausentó de Soria, posiblemente para efectuar el servicio militar. A finales de 1898 fijó su residencia en Madrid donde vivían sus padres ya retirados de la vida laboral. Gaspar comenzó entonces a llevar sus dibujos por la mayoría de revistas ilustradas de la corte donde se publicaron diseminadamente en varias de ellas: Bellas Artes, Suplemento Ilustrado, Miscelánea, Instantáneas, Actualidades, Nuevo Mundo...

     
 La historieta "Un robo en el despoblado", de Méndez Álvarez.

       La obra de Caran d'Ache en la que se inspiraba.

En el importante semanario editado por Torcuato Luca de Tena, Blanco y Negro, en mayo de 1899 apareció lo que para Gaspar Méndez sería el aldabonazo en su profesión como historietista y dibujante caricaturesco, la historieta titulada “Un robo en despoblado”. No era más que una mera copia de una historieta del gran historietista francés Caran d’Ache, pero de gran impacto y pulcra ejecución, en ella Méndez Álvarez despuntaba maneras de lo que iba a llevar a cabo a partir de entonces. No en vano, es en esta época cuando inició sus importantes colaboraciones en Madrid Cómico, el popular semanario dirigido por Sinesio Delgado. En esta cabecera Méndez se prodiga en abundancia y a lo largo de cuatro años consecutivos y prolíficos, podemos ver su evolución estilística que va desde una parodia deforme, siguiendo por un barroquismo grotesco, hasta llegar a un modernismo moderado. Estilos que también le vemos ejecutar en otra cabecera importantísima de esa época, la revista sicalíptica editada por Ramón Sopena y dirigida por Eduardo Zamacois, Vida Galante, en la que colaboró desde 1901 hasta 1904, cuando su redacción estuvo ubicada en la capital. Cabe igualmente citar que los dibujos humorísticos, historietas y chistes de Méndez se pudieron ver en la publicación barcelonesa Sicalíptico desde 1904 a 1906, pero fueron reediciones, ya que todas las historietas y las viñetas satíricas procedían de los fondos de Ramón Sopena, de su cabecera Vida Galante; de hecho, a partir de su número 58, aparecieron periódicamente anuncios publicitando la venta de los clichés de la citada revista.

   
 Álvarez en Madrid Cómico.   "Dios, patria y... miedo", historieta para Madrid Cómico   Historieta para Vida Galante.


Mientras se codeaba con los grandes literatos y monigoteros de la Corte, le dio tiempo a Gaspar para estudiar y obtener una plaza en el ministerio de Obras Públicas. No sabemos si por mediación de su hermano Enrique, que trabajaba ya en esa población y en el mismo departamento, o por méritos propios, pero lo cierto es que a mediados de 1903, con 28 años, se desplazó a Tarragona para ocupar su puesto como Auxiliar de Obras Públicas. En diciembre de aquel mismo año falleció en Madrid Gaspar Méndez Solves a los 75 años de edad.

La siguiente fructífera colaboración de Méndez Álvarez fue en la revista madrileña Monos, desde 1904 hasta 1907. Aquí publicó, como en las dos anteriores, caricaturas, humor gráfico e historietas, enviando sus colaboraciones desde Tarragona. Esta cabecera humorística para adultos, editada en Madrid por Manuel C. Carranza, fue una de las primeras revistas de historietas y humor gráfico dentro de la tebeografía española, detrás de Monigotes (1892) y The Monigoty (1897), contuvo bastante material gráfico de Gaspar Méndez, incluido su primera novela gráfica (con ese término se anunció en la época) titulada “Aventuras emocionantes de Mister Huntley y sus dos compañeros”. Comenzaron las andaduras de estos peculiares personajes en el número 63, en febrero de 1906, finalizando un año más tarde tras esporádicas e intermitentes entregas. Como regalo a los lectores, en el pliego central se publicaban por capítulos novelas encuadernables. A lo largo de 1906 y parte de 1907, Méndez Álvarez ilustró con dibujos cómicos “Vida y aventuras de Robinsón Crusoé, de Daniel De Foe”, dentro de la denominada Biblioteca de Monos, nunca jamás se ha podido ver un Robinsón tan peculiar.

 

         
 Portada de Monos, nº 80.      Protohistorieta para Monos, 67      M A. en Monos, en 1907.


Gustó Gaspar Méndez de enviar trabajos a publicaciones diversas, colaboraciones ocasionales, como si se deleitara de estar en todas. Durante tres años consecutivos, 1905, 1906 y 1907 aparecieron sus chistosos dibujos en los almanaques de La Esquella de la Torratxa, de Barcelona. También tuvo mucho que ver en una efímera publicación aparecida en Tarragona en octubre de 1905: All y Oli, semanario humorístico ilustrado. Fue fundado, según palabras de Luis del Arco extraídas de su libro El periodismo en Tarragona (1908):

(…) por una reunión de amigos, jóvenes y de buen humor, que emplearon su entusiasmo y su dinero en una empresa inútil, porque la publicación y sostenimiento de un periódico satírico resulta sumamente difícil en poblaciones como esta, próximas a una gran capital, que es la encargada de invadir constantemente los kioscos con semanarios de todas clases y matices. El director literario de All y Oli fue D. José Fayuela y el director artístico D. Gaspar Méndez, quien estuvo encargado de la parte gráfica y se dio a conocer como hábil dibujante, sobre todo en las caricaturas, que eran lo mejor del periódico.

Aparecieron únicamente ocho números y se le criticó mucho porque estaba escrito en castellano. Después de cerrar también hubo reproches pues se dejaron a deber algunos duros al impresor.

El 30 de mayo de 1908, en Tarragona, con 33 años, Gaspar Méndez Álvarez contrajo matrimonio con la joven de Tortosa Antonia Coca Batet. Lo cierto es que estos años en Tarragona no fueron muy productivos en su faceta como artista gráfico, no hemos logrado encontrar muestras ni relación de trabajos publicados, por lo que pensamos que el amor llamó a su puerta y quedó embelesado por las indudables gracias de Antonia, la que sería su esposa hasta su muerte. Este matrimonio no tuvo frutos por lo que Gaspar y Antonia quedaron sin herederos directos. Pero si que ha quedado reflejada la bondad de Méndez para con sus conciudadanos de Tarragona, de manera altruista confeccionó del cartel anunciador de la Tómbola de Caridad del año 1909. Una gran alegoría de la Caridad de grandes dimensiones ejecutada al más puro estilo modernista, trufada de símbolos de la ciudad de Tarragona. La obra fue adquirida por el personal de la jefatura de Obras Públicas, lugar de trabajo de Gaspar y su hermano Enrique, y donado a la Junta de Damas organizadoras de dicha tómbola, figurando como uno de los premios del sorteo. El asunto fue muy comentado en la prensa local y se felicitó y agradeció efusivamente al artista. Otro ejemplo de sus labores plásticas, en este caso encargo de sus superiores de Ministerio, fue la elaboración de un artístico pergamino que, en junio de 1911, fue entregado al ilustrado ingeniero jefe de Obras Públicas de la provincia, don Luis Corsini, por una comisión del Ayuntamiento de Valls, compuesta por el alcalde señor Casas y los señores Moragas y Montserrat Cuadrada.

Pasados los primeros años de su matrimonio, las turbulentas aguas regresaron a su cauce y Gaspar retomó de lleno sus menesteres historietísticos. Durante 1911 y 1912 publicó historietas, caricaturas y chistes en la nueva etapa de la renovada publicación Madrid Cómico, de la mano de su director Manuel de Agustina Tolosa. Y a partir de aquí es cuando Gaspar Méndez entró en una gran y fructífera etapa creativa.

       
 Viñeta aparecida en KDT nº 147.      KDT Almanaque para 1919      Gran viñeta en KDT nº 448


A principios de 1912 apareció en los quioscos la revista sicalíptica KDT, la dirección de su redacción y administración era Balmes número 71 de Barcelona, la misma dirección que la imprenta y tipografía La Catalana, de Carulla y Compañía. Desconocemos en qué momento cambió de manos pero en su número 147, con fecha 16 de noviembre de 1914, en el año tercero de su publicación, vemos una nueva dirección, Córcega núm. 299, la misma dirección de Buigas, Pons y Cía. Editores. En su interior tenemos varias cabeceras de sección y cuatro chistes verdes perpetrados por Gaspar con su sin par gracejo. La publicación cambió otra vez de dirección en 1917, cuándo Buigas se mudó a Industria, núm. 201, pero no apareció esa dirección en KDT, sino la de Ferlandina, núm. 5, que por aquellos años era un importante centro exclusivo de venta al por mayor de periódicos, semanarios y toda clase de publicaciones, su gerente era Miquel Guerrero que además fue editor de novelas y algún semanario, haciendo uso de esa misma dirección. Alrededor de los años veinte, la Editorial Tabarín también tuvo allí su sede por lo que algunos historiadores afirman que KDT fue editado por esta casa editora durante los últimos años de su existencia. Las colaboraciones de Gaspar Méndez Álvarez en KDT no cesaron hasta la desaparición de la revista en 1922, colmándola de mujeres pícaras, mandonas, busconas, generosas, voluptuosas, fáciles...

Durante las fiestas mayores de Tarragona dedicadas a Santa Tecla, en septiembre de 1916, el Club Náutico editó un programa especial de su fiesta marítima. La prensa se hizo eco de la noticia:

Y también ha llegado a nuestras manos uno especial de la fiesta marítima, editado por el Club Náutico, el cual merece mención aparte por su artística presentación. El Sr. Méndez Álvarez, el artista ya casi tarraconense, tuvo una buena inspiración y dibujó una portada espléndida. Están en el muelle mirando las regatas, varios sportmens; los trazos firmes la intención bien clara, hablan con los ojos y la expresión del rostro. La silueta de Tarragona al fondo, con unos detalles luminosos en el pie, el blanco de las primeras casas, está justo, es un hallazgo. Lástima, pero lástima grande, que a una señora cuyas trazos no encajan en absoluto con la factura del conjunto, en una palabra, a una señora de KDT, le ha dado el capricho de ponerse en medio, y el señor Méndez no ha tenido suficiente energía (¿o suficiente tiempo?) para hacerla retirar. Con esto no queremos decir que la tal mujer, en otro lugar, con otro ambiente, no resultara una hermosa figura. Por este programa debemos felicitar al Club Náutico, al artista dibujante y al impresor, lo que hacemos de buen grado.

Las colaboraciones de Méndez con la Editorial Buigas fueron más numerosas a raíz de la aparición en el mercado de la revista TBO. Vemos su primera aportación en los inicios de la revista, en la contraportada del número 24, aparecido el 18 de agosto de 1917. La mayoría de las contribuciones de Méndez en esta cabecera estuvieron en las contraportadas, aunque también se pudo ver alguna en las páginas interiores. Semana a semana esas contraportadas se llenaron de chistes e historietas con temáticas gruesas, crueles, salvajes incluso, pergeñadas por el magín de nuestro singular humorista. Imaginamos que los niños de entonces gozarían con ese festival de personajes raros: exploradores, baturros, vagabundos, señorones orondos, cacos, niños impertinentes y resabiados, sudorosas y gruesas señoras con bigote, feroces animales... Un conjunto de seres extraños encabezados por un inquietante y particular “niño TBO”, malvado, malencarado y ¡hasta fumador!, en la sección denominada “Chirigotas de TBO”. Hay que tener en cuenta que Méndez nunca había dibujado para niños, sus chistes e historietas hasta entonces habían sido realizados para un público adulto y eso se nota al leer sus páginas en TBO. Gaspar además tomó grandes personajes del cine mudo como Charlot o Chiquilín en la sección “TBO Film” haciéndoles correr chispeantes peripecias. Pero donde más páginas publicó Méndez Álvarez fue en los almanaques de TBO, en el de 1920, doce, catorce al año siguiente o diez en el del año 1929; parece como si, durante todo el año, en sus ratos libres pensara y realizara esas páginas para que no le pillara el toro a última hora. Las colaboraciones de Méndez en TBO finalizaron en el número 615, de marzo de 1929, en el que vemos la última contraportada dibujada por él, aparte del material que salió en los almanaques para 1929 y en el de 1930, solo dos páginas, que bien podrían haber sido hechos con anterioridad.

 
 "TBO el terrible", en TBO nº 152. "Chirigotas de TBO", en TBO nº 202. "Monerías", en TBO nº 405.  
 
 "Prueba irrefutable", en TBO nº 560  TBO Almanaque 1928  TBO Almanaque 1929  


La casa Editorial Buigas también editó libritos sicalípticos y ¡cómo no! Méndez se encargo de ilustrar alguno, como por ejemplo La casa de modas, novela erótica de Antonio de Hoyos y Vinent, publicada en 1918. En 1919, para el número 19 de la Colección Gráfica TBO, Méndez Álvarez retomó una historieta larga aparecida por capítulos en Monos en 1906, “Aventuras emocionantes de Mister Huntley y sus dos compañeros”, redibujándola por completo, confeccionando una hoja de publicidad, su correspondiente ilustración de cubierta y página de cortesía.

A finales de la década de los años diez la prensa festiva para adultos era un mercado floreciente, la revista KDT era un buen negocio: humor y picardía bien dibujada, mezclada con graciosos textos festivos, o lo que es lo mismo, lectura de entretenimiento para burgueses de lupanar. Alrededor de 1919, Aurelio Alcántara, contactó con Gaspar Méndez para que le confeccionase una publicación de ese tipo. Así nació Eva, un semanario festivo en el que se ve la mano y la pluma de Méndez Álvarez de principio a fin. Elaboró las cabeceras de las secciones fijas, la mayoría de las portadas y múltiples ilustraciones y chistes. En ella Méndez Álvarez utilizó los pseudónimos Burlón y Modesto, este último también como escritor. Aurelio Alcántara, el primer director propietario de Eva, estaba domiciliado en la calle San Paciano, núm. 6 y la administración de la revista estaba en Ferlandina, núm. 5 de Barcelona, al igual que la Editorial Tabarín, que también editó libros y folletos de temas sicalípticos. Después Eva pasó a manos José Vidal y Vidal, domiciliado en la calle Hospital, núm. 63. No sabemos a ciencia cierta cuantos números de esta publicación aparecieron, pero fueron al menos setenta.

 

Méndez Álvarez en Eva: como Burlón en el nº 20, como Modesto en el 36 y como M A. en la portada del 41.   

Bajo estas líneas, M A. en El Caloyo: viñeta del nº 12, portada del 43 y viñeta para una portada que fue censurada.


Otra publicación festiva de esos años en la que también colaboró Méndez Álvarez fue El Caloyo, un semanario festivo militar aparecido en 1921 de la mano de Ediciones Alfa, con domicilio primero en Aribau, núm.  170 y después en Córcega, núm. 260, de Barcelona. Aparecieron al menos 72 números y un número almanaque para 1922, quizás fue la primera publicación de carácter erótico para militares. La portada del número 20, ilustrada por Gaspar Méndez, no pasó la censura de la época y fue sustituida por otra del mismo autor. En plena Guerra del Rif a Méndez se le ocurrió una “genial” idea para el chiste que fue censurado: aparecía un soldado manoseando a una mujer árabe semidesnuda; por detrás venía su superior. El texto era el siguiente:

CALOYO EN LA GUERRA
– ¿Qué estás haciendo?
– Pues cachear a esta mora que me ha parecido una espía, mi teniente.
– Bueno, bueno, vete y avisa al coronel; mientras tanto yo terminaré el reconocimiento.

   
 Un antes-después en Buen Humor nº 11 (II-1922). A la derecha, historieta en Pierrot nº 116, posiblemente protagonizada por él mismo autocaricaturizado.    


El afán que tenía Méndez Álvarez por aparecer en todas las publicaciones satíricas le llevo a enviar dibujos a Buen Humor, la revista satírica madrileña dirigida por Sileno. Solamente fue publicado uno en febrero de 1922. Al pie podía leerse: Méndez Álvarez, Tarragona. Tuvo mejor suerte con Magín Piñol, un importante editor barcelonés, en los años veinte tenía en los quioscos varios periódicos infantiles: Colorín, Titín y Pierrot. Méndez Álvarez publicó de manera esporádica en Colorín y con más asiduidad en Pierrot durante el año 1923. Básicamente material muy parecido al que realizaba para TBO, pero a Piñol le debía de gustar mucho el humor de Gaspar. En el número 49 de Pierrot apareció el siguiente anuncio:

¡Hay que ver!...
El notable dibujante
MÉNDEZ ÁLVAREZ
ha dado una muestra más
de su gracioso ingenio
con el nuevo semanario
¡HAY QUE VER!...
Cómprenlo ustedes todas las semanas
10 Cts.

Este nuevo semanario ¡Hay que ver!... durante los diez primeros números estuvo confeccionado totalmente por Méndez Álvarez, usando aparte de sus firmas habituales (M A. y Méndez Álvarez) la de Pinta-Monas. Era una buena revista de humor gamberro con historietas y chistes. Llamaba la atención la espectacular doble página central. A partir del número 11 cambió el diseño de la cabecera y se llamó ¡Hay que ver..!, el ritmo de producción de Gaspar disminuyó y a partir de entonces se limitó a dibujar las portadas y bastantes páginas interiores hasta que, en el número 72, pasó a ser editada por la editorial de Juan Bruguera El Gato Negro y las contribuciones de Gaspar desaparecieron. A Bruguera no le debían de hacer gracia las creaciones de Méndez, ya que fue uno de los pocos editores que no contó con él para ninguna de sus revistas.

   

Labor de M A. en ¡Hay que ver!... A la izquierda, logo de la revista e historieta en portada (nº 5). Sobre estas líneas, historieta a doble página para el mismo número. A la derecha, historieta para el nº 10.

   

Quien sí le requirió fue Joan Sanxo (nacido Juan Sancho Farrarons), un atrevido editor catalán que llenó los establecimientos de prensa de pequeñas novelitas picantonas, con títulos variados pero muy similares entre sí: La Novela de Día, La Novela Frívola, La Novela Galante, La Novela Deliciosa y tantas otras, también editó un par de revistas que tuvieron bastante relevancia El Nandu y La Tuies. Escritas ambas en catalán, no fueron otra cosa que unas revistas repletas de chistes verdes ilustrados por aventajados artistas, acompañados por textos más o menos frívolos. La Tuies fue la continuación de El Nandu y se mantuvo en los quioscos desde 1924 a 1927. Méndez Álvarez fue uno de esos aventajados artistas que embellecieron sus páginas con hembras provocativas desde abril de 1925 hasta febrero de 1927. Aparte de lo anterior, entre 1925 y 1929 Méndez colaboró esporádicamente, sin dejar a un lado su participación en TBO, en varias revistas infantiles: TSH de Barbany; Almanaque Tom Mix para 1930, de Ediciones Biblioteca Films; Chiquitín y Periquito, de Marco y otras.

     
A la izquierda, viñeta pícara para La Tuies nº 92.
 
A la derecha, viñeta pícara para La Tuies nº 152.
   
             

En septiembre de 1925 falleció la madre de Gaspar, María Álvarez Pérez, viuda de Méndez, a los 87 años en Tarragona, ciudad con la que Méndez Álvarez estuvo muy implicado, y no fueron pocos los ejemplos que dejó de ello. Sirva la siguiente noticia, aparecida en el Diario de Tarragona en enero de 1925, como muestra:

La humorística sección “Ku-Klux-Klan” encargada de la organización de los bailes de Carnaval en el Ateneo tarraconense repartió ayer el anuncio de dichos bailes.

El mencionado anuncio consiste en una chispeante aleluya formada por treinta cuadros, debida al lápiz del notable dibujante nuestro particular amigo don Gaspar Méndez Álvarez, que ha puesto una vez más de manifiesto sus dotes artísticas y su ingenio.

Realmente resulta original la idea del anuncio y ha sido muy celebrada por el público, que indudablemente la archivará como recuerdo del buen humor de la juventud de esta época.

La prensa diaria de su localidad de residencia, Tarragona, se sumo a La larga lista de publicaciones en las que Méndez publicó chistes a lo largo de su carrera. En marzo de 1927 fue La Tarde la que así lo anunciaba: «Y ahora viene a sumarse también a LA TARDE el celebrado dibujante local Gaspar Méndez Álvarez, cuyo ingenio y cuyo lápiz no necesitan encomio alguno por haberse acreditado ventajosamente en revistas de Madrid y Barcelona.» Dos años más tarde, en agosto de 1929, comenzaron sus colaboraciones en El Diario de Tarragona elaborando chistes de actualidad.

 

         
  Ilustración para Diario de Tarragona (25-VII-1913)        Viñeta de M A. en el diario tarraconense La Tarde (2-IV-1927).  


Fue en el año 1931 cuando Méndez Álvarez entró en contacto con Vicente Miguel Carceller, intrépido editor valenciano y responsable de todo un muestrario de publicaciones eróticas, satíricas, provocativas e irreverentes. En este periodo Méndez Álvarez se tornó mucho más feroz, incisivo y crítico. Amparado por la instauración de la Republica se vio con alas para tirotear desde sus chistes a toda esa clase dirigente de derechas, al rey, a los altos cargos, obispos, frailes, curas, monjas… Fue desde La Traca y La Chala desde donde disparó de este modo. Méndez Álvarez tenía repulsión por los mandatarios y servidores de Dios, y en sus caricaturas les hizo responsables de multitud de vicios y aberraciones, pero se guardó muy mucho de ello y se escondió tras firmas como MA (ya utilizada con anterioridad), G:, Fray Badajo o El Moro Muza, igualmente simplificó y ensució su estilo de dibujo para no ser reconocido. Hemos podido ver ejemplos de todo lo anterior hasta principios de 1937. Las otras publicaciones de la Editorial Carceller, El Piropo, Bésame, Fifí, Rojo y Verde eran simplemente verderonas y en ellas se limitó a seguir con sus chistes tan habituales en publicaciones anteriores como KDT, Eva o La Tuies. Parece ser que los números almanaques fueron debilidad de Gaspar, para los del año 1933 de Bésame, de Fifí y en el Almanaque Galante de 1933, también editado por Carceller, su participación fue abundante, llegando casi a copar la parte gráfica de estas publicaciones.

   
 La Traca nº 10 (4-VII-1931).    La Traca nº 39 (23-I-1932).    Historieta para Bésame (1932).
   
 La Traca nº 1.136 (13-V-1936).    La Traca nº 1.159 (4-XI-1936).    Almanaque Rojo y Verde 1933


Algunos de los últimos trabajos satíricos de Méndez se publicaron en Barcelona en 1936, fueron del mismo estilo que lo aparecido en La Traca. Sus responsables se escondían bajo el nombre de Editorial Coronilla, en la calle de las Arrepentidas de la Ciudad Condal. Desde la revista de doble cabecera ¡El Straperlo! El semanario más tonto de España / La Guindilla, semanario cómico, la primera de carácter político y la segunda erótico-festiva, se lanzaron mensajes anticlericales de manera masiva. Muchos de estos chistes fueron recopilados en la colección Bicharracos Clericales. Las firmas de Méndez Álvarez se multiplicaron: Fray Morcilla, Fray Tomate, Fray Zumbón, Fray Sandunga, Fray Cebón, Fray Meneo...

 

 
 Viñeta firmada por Fray Morcilla aparecida en El Straperlo nº 10 (23-V-1936)

 

 
 El Straperlo nº 17 (11-VII-1936)    Viñeta en Bicharracos Clericales


Desde enero de 1937 hasta su muerte, no hemos encontrado ningún dibujo, chiste o historieta de Gaspar Méndez Álvarez, suponemos que viendo el cariz que fueron tomando los acontecimientos de la Guerra Civil, con muchísimo miedo tras todo lo que había dibujado durante los últimos años, se enfrascaría en su trabajo cotidiano como Auxiliar Mayor del Cuerpo de Auxiliares de Obras Públicas del Ministerio de Obras Públicas de Tarragona esperando que terminara la dichosa guerra y que se calmaran las cosas.

En cualquier caso, M A., el autor de historietas gamberras, viñetas sicalípticas, anticlericales y antifascistas, no murió fusilado en Valencia, como hasta ahora siempre se había afirmado. Gaspar Méndez Álvarez falleció el día 25 de Febrero de 1940 en Tarragona. No conocemos la causa, pero a juzgar por su esquela, publicada en el Diario Español de Falange Española Tradicionalista y de las JONS, «murió cristianamente».

 

A la izquierda, la esquela citada.

 

Agradecimientos:

Muchas gracias a Lluis Giralt Llordés por su inestimable ayuda con las revistas KDT, El Caloyo y Eva, así como por las imágenes por él cedidas.
A René Parra Lambíes por su pista sobre Caran d’Ache.
A Joaquín Campo Betés por su ayuda en labores de búsqueda y corrección.
Y muy especialmente, al colectivo Tebeosclásicos, sin cuya ayuda hubiera sido imposible desarrollar esta investigación.

TEBEOAFINES
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Creación de la ficha (2017): Dionisio Platel. Revisión y edición de Alejandro Capelo y Manuel Barrero · Datos e imágenes obtenidos de diversas fuentes
CITA DE ESTE DOCUMENTO / CITATION:
DIONISIO PLATEL (2017): "Méndez Álvarez, el humorista excesivo", en Tebeosfera, tercera época, 2 (11-III-2017). Asociación Cultural Tebeosfera, Sevilla. Disponible en línea el 21/XI/2024 en: https://www.tebeosfera.com/documentos/mendez_alvarez_el_humorista_excesivo.html