T: Centrémonos ahora en Blankets. ¿Qué opinas de la edición
española, novedad en este Salón?
CT: Me gusta, tiene un aspecto impresionante. Tiene mejor papel que la
edición estadounidense, tapa dura... La edición original era en tapa
blanda. Hicimos una pequeña tirada en tapa dura pero era bastante más
cara, más para coleccionistas. Sí, me gusta la edición española, no
tengo quejas.
T: ¿Qué piensas al ver tu obra traducida?
CT: No leo español
así que no sé si la traducción es buena o no. Lo averiguaré en uno o dos
meses, tengo amigos que me dirán si la traducción es acertada. Había
algunas cosas en la traducción al francés que a mis amigos franceses no
les gustaron y voy a intentar hacérselo llegar a la editorial antes de
que hagan la segunda edición.
T: Blankets tiene unas seiscientas páginas. He leído que la
escribiste y dibujaste en su totalidad en tu tiempo libre.
CT:
Así es.
T: O sea que no te quedaba tiempo libre para ninguna otra cosa.
CT: Bueno, era aún
más dramático que eso, estaba trabajando como canguro y al mismo tiempo
en un mercado y en otros encargos de ilustración para pagar las
facturas, mientras trabajaba también en Blankets. Aparentaba diez
años más de los que tenía.
T: Y ahora, después de haberlo publicado y del éxito que ha tenido,
¿vives de los cómics?
CT:
Eso espero, no estoy seguro. Lo averiguaré cuando vuelva a Estados
Unidos. Disponía del dinero suficiente para financiar mi viaje a Europa,
cuando regrese llevaré viajando un total de tres meses y medio. Puede
que no me quede dinero, es posible que tenga que hacer de nuevo algunos
encargos de ilustración.
T: Al menos no tienes ya que trabajar en cualquier otro empleo.
CT: Sí, los
trabajos de ilustración están bien, estoy dibujando pero aún así para mí
siguen siendo encargos, no tiene nada que ver con trabajar en mis
cómics.
T: Te llevó algo más de tres años completar Blankets. ¿Ves
diferencias entre unas partes y otras?
CT: Sí, pero no es
algo que me preocupe, es lógico en algo que lleva tanto tiempo. Además
los lectores suelen decirme que tiene un estilo visual consistente. Pero
yo fui quien lo dibujó así que sí veo ciertas diferencias.
T: Estos últimos años se está hablando mucho de la “descompresión“ de
los cómics. Se dice que las historias ocupan muchas más páginas de las
que se habrían empleado hace unos años. ¿Qué opinas sobre eso? ¿Utilizas
las páginas que sean necesarias para darle a una escena el espacio que
crees que necesita?
CT: Bueno, en
realidad me siento mal por todos los árboles que han tenido que cortar.
Si pudiera me habría gustado contar la historia en menos páginas, pero
esta es la extensión con la que me he sentido cómodo como escritor y los
lectores parecen sentirse cómodos también. La mayoría de los cómics son
demasiado claustrofóbicos en términos de la acción, en los saltos de una
escena a la siguiente. Me interesa un ritmo más cercano a una novela,
puedo utilizar una página para mostrar a una persona fumando, o quizás
diez páginas. Me gusta bajar un poco la velocidad, quiero ver los
detalles. Tradicionalmente los cómics le han prestado muy poca atención
a la calidad de las emociones, todo es acción, acción, acción.
T: ¿No crees que eso tiene que ver con que cada número deba ser
obligatoriamente de veintidós páginas?
CT: Sí, es
horrible. Además están pensados para que la gente los coleccione más que
los lea, son realmente caros, te pueden salir por casi cuatro dólares
por número. Como lector prefiero comprar un tomo que me cueste veinte
dólares y me cuente una historia en las páginas que sean necesarias.
T: ¿Sientes más presión respecto a lo que el público espera de ti
después de Blankets?
CT: No, no siento
presión en cuanto a lo que los lectores están esperando. Estoy tan
ocupado con la promoción, viajes, firmas y todo eso que no he tenido
tiempo para trabajar en mi próximo cómic y cuando la gente me pregunta
“¿cuándo sale tu próximo cómic?” respondo que ahora ni siquiera estoy
trabajando en él y que durante los próximos cinco meses voy a estar
viajando y haciéndole a la gente dibujos gratis en sus libros. Todo lo
que estoy dibujando últimamente está debajo de las portadas de los
libros de los lectores que me lo piden.
T: ¿Es duro estar tantos meses viajando o es como unas vacaciones?
CT: Es más bien
duro. Llevo dos meses viajando y ya estoy deseando acabar. Aún me queda
un mes y medio en Europa, voy a ir a Ámsterdam, a Londres, después
estaré de promoción por Alemania... y cuando regrese a Estados Unidos
iré a Nueva York, a Washington y prácticamente por todo el país antes de
que vuelva a tener un hogar y estabilidad y pueda volver a trabajar.
T: Hablemos un poco de tu método de trabajo.¿Escribes un guión completo
para ti mismo, como si fuera para otro dibujante?
CT: Primero escribo
un guión básico sólo con palabras, en el que describo una escena detrás
de otra. Después de eso hago el guión completo pero es ya con dibujos,
es como un storyboard, y así escribo todo el libro y es ese mini
cómic sobre el que trabajo y hago los cambios necesarios antes de
comenzar el dibujo definitivo. Pero es un cómic casi desde el principio.
Algunos autores escriben un guión completo, casi como un guión de cine,
y entonces lo dibujan.
T: Tú escribes el guión completo con imágenes.
CT: Exacto. Lo hago
en un cuaderno y son dibujos bastante detallados, la gente me dice
“deberías publicar
esto directamente” y eso es porque me encanta sumergirme completamente
en cada escena, dibujo todos los detalles.
T: ¿Cambias algo después, en el dibujo definitivo?
CT: Sí, siempre.
Suelen ser cambios pequeños, pero siempre hay alguno. Si hay un cambio
realmente importante probablemente vuelva a trabajar sobre el guión
antes de regresar a las páginas definitivas, en estas suelo cambiar sólo
pequeños detalles porque disfruto más teniendo toda la estructura
decidida y preocupándome sólo de cambiar algún elemento gráfico en el
último momento.
T: ¿Qué parte del proceso completo es tu favorita y cuál es la que menos
te gusta?
CT: Mi favorita y
también la más fácil es el entintado. Es el último paso, del que por fin
sale la página acabada y es un proceso casi intuitivo, puedo tener la
mente en otra cosa y escuchar música mientras estoy entintando.
Generalmente la parte que menos disfruto es escribir el guión completo
con dibujos. Suele llevarme meses y meses y a veces es realmente
extenuante, puedo hacer casi veinte páginas un día y al día siguiente
sólo una, no es algo constante. Mientras que cuando estoy entintando es
como un trabajo de nueve a cinco, me siento como un trabajador de clase
media con un horario y puedo tener la tarde libre. Me gusta eso, la
estabilidad de esa rutina. Lo echo de menos ahora que estoy viajando.
T: ¿Qué música escuchas cuando estás entintando?
CT: De todo. Antes
de empezar este viaje estaba realmente obsesionado con Flaming Lips,
me encanta el rock, pero escucho todo tipo de música.
T: Me comentaste antes que consideras el color una distracción, ¿no
piensas usarlo en ninguno de tus proyectos futuros?
CT: Como dije
antes me gusta la pureza del blanco y negro. Ahora estoy considerando la
posibilidad que me han ofrecido de utilizar un color extra, tengo que
pensarlo. Quizás use, por ejemplo, azul y negro y los utilice para crear
atmósferas. Creo que un color no es demasiada distracción, pero el
espectro completo sí lo es.
T: ¿Utilizas los tipos de letra en el texto como otra herramienta más?
CT: No, nunca. Para
ser sincero eso es lo único que no me gusta de ver mi trabajo traducido
y es que tienen que crear una fuente de letras a partir de mi escritura.
Así que el resultado se parece mucho a mi letra pero no es tan natural,
no está realmente escrito a mano como lo está en la edición original.
T: ¿Tienes pensado trabajar con otro guionista o dibujante?
CT: No. Me interesa
hasta cierto punto pero he rechazado proyectos con gente con la que
realmente me gustaría colaborar. Hay algo atrayente en la idea de la
colaboración pero tengo mis propias historias que necesito contar. Mi
visión de lo que los cómics deberían ser es una persona que escribe y
dibuja para los demás, así es como veo a un creador de cómics.
T: Ibas a dibujar la miniserie Unstable Molecules para Marvel,
pero al final sólo hiciste las portadas.
CT: Sí, ese es un
ejemplo de proyecto que intenté realizar y rechacé. Es de James Sturm,
que es amigo mío y cuyo trabajo admiro. Me gustó el guión así que estaba
ilusionado pero en cuanto empecé a dibujarlo toda la diversión
desapareció, no me sentía comprometido con el proyecto. Así que lo
rechacé y dibujé sólo las portadas. Lo mismo me ocurrió con otro trabajo
para Green Lantern. No es tan divertido como trabajar en mis
propios cómics.
T: ¿Qué piensas sobre los superhéroes?
CT: No me gustan.
Creo que hay un lugar para los superhéroes y que son importantes porque
mantienen a muchos lectores interesados por el medio, pero en mi caso
cuando tenía doce años ya había perdido todo interés en ellos. Creo que
para atraer más gente a los cómics debemos ofrecer más cosas aparte de
superhéroes con poderes mentales o que vuelan.
T: Pero muchos niños empiezan con los superhéroes.
CT: Sí, pero
también empiezan con otras cosas, o eso creo. Cuando yo era pequeño me
gustaban los superhéroes pero me gustaban más los cómics de humor como
la revista Mad o El fantasma Casper. Esos me encantaban.
Los superhéroes que me gustan son los que tienen un tono desenfadado,
inocente, como los que se publicaban hace muchos años, pero no los que
se hicieron después. Los superhéroes de los últimos años no me resultan
interesantes.
T: ¿Conoces el trabajo de los autores europeos clásicos?
CT: Por supuesto.
Hergé, Peyo, Giraud... también me gusta mucho la nueva
generación de autores franceses: todo lo de L’Association, David
B., Blutch, Blain, Sfar... sus trabajos me resultan muy inspiradores.
T: He leído que tu próximo trabajo se va a titular Habibi y sin
embargo este mes Top Shelf ha anunciado para este verano una obra tuya
llamada Carnet de voyage...
CT: Bueno,
Carnet de voyage efectivamente no es mi próximo trabajo, es un
proyecto aparte y ni siquiera está acabado, aunque le falta poco. Es el
diario del viaje que estoy haciendo por Europa y Marruecos, donde he
estado tres semanas. Es una combinación de dibujos, esbozos y algo así
como partes de un diario en forma de cómic en los que, casi cada día, he
ido contando lo que pasa en mi vida a lo largo de este viaje. No estoy
siendo el típico turista, no he hecho ni una sola fotografía en dos
meses, sino que he estado dibujando y escribiendo. No es mi próximo
cómic, sino algo para los lectores mientras esperan mi próximo cómic.
Tendrá algo más de doscientas páginas, lo que es un tamaño sensiblemente
inferior a Blankets, pero Blankets me llevó casi cuatro
años y esto sólo me está tomando dos o tres meses.
T: ¿Has empezado ya a trabajar en Habibi?
CT: Sí, antes del
viaje. Es un relato al estilo de Las mil y una noches. Completé
el guión básico y llevo unas sesenta páginas del desarrollo de este en
cómic. Creo que podría tener un tamaño similar a Blankets, unas
seiscientas páginas. Cuando escribía el guión pensaba que iba a ser más
corto, pero ahora pienso que quizá sea incluso algo más largo.
T: Echas de menos trabajar en ese cómic.
CT: Sí. Por
desgracia aún me quedan otros dos o tres meses de viaje. Y después es
posible que tenga que emplear otro par de meses haciendo encargos para
ganar algo de dinero. Espero tener más tiempo el año que viene para
trabajar en él, es realmente frustrante.
T: ¿Crees que lo acabarás el año que viene?
CT: No, espero
tenerlo en dos años, para el 2006.
T: Mucha suerte y gracias por la entrevista.
CT: Gracias a ti. |