Libro de viñetas con 102 páginas, encuadernado en rústica.
¿Cómo puede hacer humor una persona obstinada en ignorar las fuentes de que bebe el propio humor?
¿De qué hablamos cuando hablamos de amor, de política, del problema irresoluble de la vida?
¿Puede borrarse nuestra herencia romántica –encaminada poco a poco a su condición póstuma− con una sonrisa?
En Sonría, por favor, una recopilación de viñetas humorísticas de muy distinto signo, recorre su autor algunos de los hitos que han marcado estos últimos meses de actualidad, pero no solo; en ella encuentra asimismo expresión una veta de nostalgia por lo ya acontecido, y de preocupación por lo por venir.