Libro ilustrado con 64 páginas en color, encuadernado en cartoné. Editado en euskera en Turín y distribuido clandestinamente en España.
Ofrecía un relato fabulístico, pero de obvia interpretación crítica, que se valía de herramientas del lenguaje de la historieta.
Libro que ofrecía un cuento infantil sobre un pueblo que era obligado a teñirse de color amarillo (herrialde berdea significa "países verdes") y que hacía referencia a la opresión y falta de libertades que en ese periodo sufría el pueblo vasco según los autores del libro. Se da la circunstancia de que el libro fue escrito por Jonan Aranguren "Iharra" e ilustrado por José Benito Mujika "Xenki", ambos militantes de ETA y ambos abatidos en sendas operaciones de la guardia civil. La obra fue editada póstumamente en homenaje por sus muertes.