Libro de 136 páginas en color, encuadernado en rústica con solapas.
Texto promocional:
La fuga es un homenaje al jazz, al amor, a la dignidad, a los abuelos, y nos recuerda que ellos también han tenido treinta años y toda la vida por delante. Una historia magistralmente narrada… sin palabras.
En poco más de un centenar de páginas, Blanchet logra una extraña unión de imposibles: imágenes que evocan música, ilustraciones que se animan y conforman secuencias de dinámica propia, bitonos que explotan en un arcoiris. Una especie de eclosión sinestésica donde los sentidos se confunden y entrelazan para conseguir una experiencia única. Lo que debería ser una seguido de ilustraciones a toda página, estáticas, toma vida y movimiento, quizás avivadas por el aliento del gran Al Hirschfeld, omnipresente, inspirador claro de esa línea refinada y delicada, que nos lleva entre algodones. La Fuga no es un libro para leer. Es un libro que se siente.