Aficionado al manga salmantino que creció Vinaròs, donde autopublicó el fanzine Manganime, colaborando posteriormente como divulgador de manga y anime japonés con Manga Films, Planeta y Salvat. En 1993 se trasladó a Barcelona para trabajar en la tienda de Norma Cómics, comenzando también a colaborar con Norma Editorial, primero como articulista y técnico editorial, luego como editor y llegando finalmente a desempeñar el cargo de director general.