Gérard Lemaire se formó en Bellas Artes en Bruselas, donde conoció a Jean Graton, quien le convenció de trabajar en la historieta, concretamente en la serie Michel Vaillant, que fue su bautismo de fuego. Tras realizar algunos cuentos para Dupuis, Lemaire, bajo la firma Glem, trabajó en algunas revistas como ilustrador (Tremplin, Bonjour, Dorémi, Soir Jeunesse), aunque también dibujó alguna historieta en esas cabeceras, como la serie Ted and Narcissus. Habiendo visto la progresión de su trabajo, caracterizado por una línea expresiva, Franquin le reclamó para trabajar en la revista Spirou, donde desarrolló la serie Le Monstre du Gouffre Noir, ahora bajo la firma Gélem.
Tras realizar el servicio militar prosiguió trabajando como diseñador ligado al festival de Eurovisión, como dibujante de prensa (en l'Evénement o Pourquoi pas?), y como director de un estudio publicitario, Publi-Market, del que no se desligaría en lo sucesivo. Durante todo este tiempo coqueteó con la historieta en alguna revista, como la médica AMB, y en los ochenta volvió a la industria del cómic para abordar series como Contes de Luce (con Luce Degotte), Freddy Guidon (con Thierry Groensteen) y Les Voraces (con Raoul Cauvin). Esta última serie obtuvo gran popularidad y alcanzó a publicar cinco álbumes, editados por Dupuis. Luego, sus trabajos en cómic fueron siendo cada vez menos en los años noventa. Por ejempo, en 1992, dibujó Non sense, serie escrita por François Gilson para Spirou.