Fernando Fernandez Eyre, conocido como Fernand, Ghost o Monray, nació en Entre Riós y se trasladó a España siendo un niño, viéndose del lado republicado durante la Guerra Civil, llegando a participar como combatiente y, como resultado, sería internado en un campo de prisioneros (esto fue detallado en una nota de Esteban Larruccia publicada en el Nº 2 del fanzine Crash!, en 1980).
De regreso a Argentina en 1940, comenzó a colaborar en la Editorial Tor (fundada por Juan Carlos Torrendell, nacido en Palma de Mallorca), primero en la revista Fenómeno y posteriormente en Pif-Paf. En 1943 comenzó a colaborar las publicaciones de Manuel Lainez, principal editor de revistas de la época, publicando centenares de historietas a en los siguientes catorce años, adaptaciones hechas por él mismo o sobre guiones ajenos. Destacó por su participación en la serie norteamericana El Zorro, concretamente en los episodios realizados por autores argentinos para las páginas de El Gorrión, revista lanzada por Lainez para competir con El Tony de Columba. También, por sus tiras publicadas en el diario vespertino La Razón entre 1947 y 1949.
Justo en el final de la década de los años cuarenta, Fernand comenzó a colaborar con tres editoriales que estaban desplazando a Lainez en el campo de las revistas: Quinterno, Abril y Columba. Con los dos primeros sellos colaboró brevemente, con series como Paul de Bernís contra Montefeltro, desarrollada en Patoruzito entre 1949 y 1950, y Rey por siete días, publicada en Rayo Rojo en 1950. Con Columba colaboró más de veinte años, sobre todo en la revista El Tony, para la cual dibujó una de las historietas de mayor impacto en ventas en la Argentina entre 1953 y 1956: El León de Francia, adaptación del radioteatro homónimo escrito por Roberto Valenti y recuperada en dos oportunidades (en Fantasía desde 1954, por ejemplo). Durante esa década, Fernand también publicó en revistas como Pimpinela, Suplemento de Bucaneros y en 1956 volvió a las páginas de La Razón tras ganar un concurso convocado por ese diario con su historieta "El cetro perdido".
Posteriormente, colaboró en Anteojito y en las revistas El Huinca y Fabian Leyes y en Aventuras del Errante con historietas de horror, género que abordó también en colaboraciones para editoriales norteamericanas, mientras que en Columba uno de sus últimos trabajos fue Ten cuidado con la pesca, Jaques, serie policial aparecida en El Tony en 1974.