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PRESENTACIÓN DE EL CAPITÁN TRUENO, EN CÓRDOBA (4-I-2002).


Presentación del libro El Capitán Trueno. Un héroe para una generación, en Córdoba el día 4 de enero de 2002

Presentes en la mesa: Joaquín Dobladez (director del Instituto Andaluz de la Juventud), Alejandro Casasola, Juanma Bajo Ulloa, Jose Antonio Ortega Anguiano.

Lugar: sala de exposiciones del Albergue Juvenil de Córdoba.
Duración:
tres cuartos de hora

 

 

[ Tarjeta de invitación expedida por el Instituto de la Juventud para la ocasión

Tarjeta de invitación

Esta presentación supone la segunda del libro, puesto que se hizo una (con Casasola y Ortega solamente) en el Segundo Encuentro de la Historieta de Sevilla, si bien en aquella ocasión no estuvo el libro a disposición del público por un presunto problema con la imprenta. La presentación de 2002, ya con el libro impreso, tuvo el aliciente de la presencia de Bajo Ulloa, director de cine que prologa el libro y que explicó las razones por las cuales se apartó del proyecto cinematográfico El Capitán Trueno.

Joaquín Dobladez: Si os parece bien, vamos a comenzar. Quiero daros la bienvenida, y comentaros un poco lo que os voy a presentar aquí, en Córdoba: El libro sobre El Capitán Trueno. Nos acompañan su autor, por supuesto, José Antonio Ortega. También nos acompaña Alejandro Casasola, que es el presidente de Veleta y el director del Salón Internacional del Cómic de Granada; y Juanma Bajo Ulloa, que ha hecho el prólogo del libro y también va a colaborar un poco, comentando... Eh... Comentaros que yo conocí a José Antonio un día que estaba también Juanma, en una Semana del Cine Joven de Córdoba, donde Juanma vino como profesor dentro de lo que era el curso de guión ¿Se oye?... Y aquella noche, después de la clase, y a la hora de ir a tomarse una cerveza, había conocido de la obra de José Antonio, tenía también interés en conocerle y, bueno, fue un momento donde de alguna forma se produjo aquel encuentro. José Antonio ya colaboró con el Instituto Andaluz de la Juventud, que en aquel momento era Dirección General de Juventud, en el noventa [1990], cuando se hizo un, digamos, un recordatorio de lo que fue el Capitán Trueno; donde ya se hizo un tebeo, un catálogo, una edición, de alguna manera, él estuvo coordinando todo esto, con lo cual es, digamos, apasionado. Además, él también ha hecho una antología, un vademécum, de alguna forma, de lo que ha sido el cómic desde el siglo pasado hasta hoy. Yo no me voy a enrollar mucho más, le voy a ir pasando la palabra a los que estamos en la mesa. Y... sí quisiera decir, bueno, que ahora que estamos casi en vísperas de los Reyes Magos, lanzar un mensaje a los Reyes Magos de que regalen muchos cómics, que los cómics es una forma de divertimento absolutamente genial para los jóvenes, y no solamente para los jóvenes, también para los adultos. Para los más jóvenes de todos también es una forma de iniciación a la lectura, y yo creo que mucha gente, pues cuando los Reyes Magos nos trajeron los primeros cómics, fueron de las primeras cosas que nos atrevimos a leer, y creo que sería un buen momento de que los Reyes Magos dejasen unas viñetas en los sofás de los niños. Cedo la palabra a Alejandro Casasola.

Alejandro Casasola.- Hola a todos, gracias por estar aquí. El hecho de que nosotros, desde Ediciones Veleta, la asociación juvenil, queramos presentar este libro aquí en Córdoba quizá tiene mucho que ver con lo que ha dicho aquí Joaquín. La primera edición nació en Córdoba hace diez años, José Antonio nació en Córdoba, esa noche fue cuando yo conocí a José Antonio, Veleta conoció a José Antonio, el libro se conocía hacía 10 años, y el libro era casi ilocalizable, por las circunstancias que fuese no se llegó a tener la distribución adecuada y toda la gente lo conocía por rumores. Nos conocimos y aprovechamos la ocasión para sacar una reedición actualizada, y quisimos aprovechar el tironcillo de este hombre [Ulloa] a ver si así vendíamos más, pero al final ni se va a hacer la película y ni siquiera lo hemos puesto en portada. El tema de este libro, desde Ediciones Veleta, es que es de la colección 1/2 , que es el tercer libro que editamos, aunque esté el número 2 [en créditos]. El tercero salió antes que el segundo, pero en fin, son cositas de la imprenta y del trabajo que a veces nos va así. Y yo creo que aquí los que tienen que hablar son Juanma, con su introducción, y José Antonio, que es el que lo ha hecho. Así que nada...

Juanma Bajo Ulloa: Buenos días, o buenas tardes ya. Sí, sí, sí, sí, sí, esto no funciona. Perdonad... Así se me oye ¿no? Perdonáis el retraso éste que ha habido; la noche fue un poquillo larga y el atasco de Córdoba también se las trae. Y deciros que, nada, José Antonio es el que va a hablar hoy, quien es el protagonista, quien es el autor y el responsable de que estemos aquí. Y tengo que agradecer a estos señores el haber venido a Córdoba, porque yo era prácticamente la única ciudad de Andalucía que no conocía, pese a que mi madre nació en Jaén, en Jimena, para más señas, pero nunca he venido a Córdoba desde que me invitaron estos señores con ocasión de aquella semana de cine y del libro. Y de conocer a José Antonio porque yo estaba entonces con el proyecto del Capitán Trueno, del que no sé mucho más que vosotros, la verdad que no sé que va a pasar con esa película, no sé si se va a hacer o no se va a hacer. Por eso vine a lo de hace dos años o un año, un poco fugazmente, pero vamos, he podido ver un poquito como es la ciudad, y también a los lugareños y a las lugareñas, aunque no tanto como quisiera. La noche cordobesa, la flora, la fauna..., y deciros que, nada, que me llamaron para hacer el prólogo; yo ya había conocido antes a José Antonio y para mí era un auténtico lujo hacer un prólogo de un libro que era, según yo he sabido, según yo creo, el único acercamiento al personaje, que yo creo que es uno de los puntales del cómic en nuestro país. Todos a los que nos gusta el cómic, todos hemos tenido en las manos los cómics que se hacían en este país, pues junto a Mortadelo y Filemón son los dos personajes, yo creo, más populares. Para mí era un personaje más real, más real que algunos que podían haber existido. No era alguien, como digo yo, que tiraba rayos ni que volaba ni que tenía superpoderes, sino alguien mucho más de carne y hueso, y a mí siempre me ha gustado bastante esto ¿no? Las cosas que sean reales. Por eso quizás el personaje me atrajo, su relación con la Edad media, que es la época quizá que más me atrae, por su estética y por el oscurantismo que también existía en la Edad Media, que a mí es una cosa que me atrajo muchísimo. Por todo esto, pues bueno, acepté hacer el prólogo, que es una pequeña aportación solamente para decir que creo que es muy de agradecer que alguien pierda su tiempo, o gane su tiempo, escribiendo buscando todas las referencias del personaje. Cuando tengáis el libro en las manos vais a ver que hay un estudio exhaustivo, con mucho rigor, de todas las características de los personajes, de cómo los autores, Víctor Mora y Ambrós (bueno, Ambrós era el dibujante; Mora era el creador) pues muchas veces intentaron evitar la censura. Cuáles eran los temas que trataron con los cómics. Vais a ver también incluso un índice al final de todos los dibujantes que ha habido en la saga, de todas las ediciones que ha habido... Creo que es un estudio..., creo que es un trabajo bastante riguroso y dignísimo, y sobre todo y, bueno, como también contaba ayer, si esto hubiera sido en otro país, aparte de tener muchos libros sobre El Capitán Trueno, tendríamos series, películas, mucho más trabajo y bibliografía alrededor, pero por desgracia lo que ocurre aquí es que si no es por personas como José Antonio o por instituciones que de repente se dedican a apoyar algo como el cómic, que no se por qué siempre ha sido algo maltratado, que siempre se ha tenido como arte menor, pues no podríamos tener estar perlas que de repente aparecen. Y yo lo único que puedo hacer es, pues, agradecer cómo, bueno, pues como persona cercana al cómic, como fan, incluso fanático durante una época de los cómics, como lector y como, por supuesto, espectador de esa película que se va a hacer y que espero que se haga, pues que agradezco muchísimo que haya alguien que utilice su tiempo creando, creando, buscando toda esta información que está puesta en el libro, y que yo creo que como digo es una auténtica perla. Y nada más, paso la palabra a José Antonio, que es el auténtico autor y que tiene que responder preguntas y decirlos lo que opina.

José Antonio Ortega: Yo quisiera empezar mi participación en esta mesa hablando un poco, haciendo un poco de historia sobre cómo se pergeñó este libro. Este libro es fruto, creo ya se ha dicho anteriormente, de una exposición que se hizo allá por el año noventa, que hicimos cuatro aficionados de aquí de Córdoba: Rafa Infantes, Miguel Ángel Cáceres, Juan Francisco Pérez y yo. Y, la verdad, que fue toda una experiencia porque aquella exposición tuvo una repercusión bastante grande y tal vez por eso quizás, por el propio hecho de la exposición, el libro llegó a tener una cierta repercusión. También un poco a remolque de este éxito relativo que tuvo... hablo de éxito relativo porque la cultura nunca es un éxito en un país a pesar de lo desarrollados que estamos, pero en fin, sería deseable que fuésemos un poco más, que hiciésemos un poco más caso a lo que realmente nos atañe como individuos, que es la cultura que tenemos alrededor, ¿no? Entonces, decir que simplemente lo que se ha hecho con el libro en esta edición actual es revisarlo de nuevo. Se ha quitado, eh..., el otro libro era un poco fruto de..., se quiso dar una entidad, de alguna manera, haciendo que apareciesen artículos de diversos autores que servían un poco de contrapunto a las propias ideas que se exponían en el libro mayoritariamente por mi parte. Y entonces aquel libro fue producto de un tiempo que ahora he creído conveniente, porque incluso se contradecían algunas de las ideas que se decían. Pues simplemente esos artículos se quitaron, no porque no fuesen válidos sino porque simplemente por eso, por resultar contradictorio o incluso reiterativo, y simplemente lo que se ha hecho ha sido añadirle unos cuantos de artículos más y lo que es el apéndice, donde se dan referencias de todos los cómics, que se han publicado, con los dibujantes, guionistas, las fechas de publicación de cada uno de esos tebeos del Capitán Trueno que fueron editados a lo largo de los años... y eso, simplemente lo que se ha hecho ha sido llevarlo hasta el año 2000 ó 2001. Primordialmente eso es el libro.

Dobladez: Pues, si tenéis alguna preguntita.

Componente del público: [inaudible; a Bajo Ulloa, sobre el proyecto cinematográfico]

Bajo Ulloa: Pues yo dejé el proyecto prácticamente hace un año ahora, en enero hará un año que hubo la ruptura entre la productora y yo, porque se había acabado el guión –la redacción del guión fue lo que me hizo conocer a José Antonio, lo que me hizo contactar con él, porque yo trataba de localizar todo tipo de bibliografía y toda la información que hubiera sobre el Capitán Trueno, y también conocí a Víctor Mora. Ambrós ha muerto, por desgracia no pude hablar con él, pero, bueno, tenía una batería de preguntas para hacer el guión y conocí a Mora, que muchas de las historias las creó él, las creó también el dibujante, que era, como decía, reivindicar también la figura del dibujante Ambrós, que fue el que inventó toda la estética del Capitán Trueno–, y me tiré prácticamente un año leyendo libros de historia medieval, de cruzados (porque el Capitán Trueno, al final, acabó siendo cruzado) y cuando terminé el guión, aproximadamente en verano del año 2000, con todo el proyecto anunciado públicamente, como sabéis se hizo una gran campaña de publicidad del proyecto, y con toda la información que yo creía que necesitaba para hacer esta película, porque era una película que estaba basada en el mundo del cómic, que estaba basada en algo fantástico, tenía mucho rigor o intentaba tener rigor. Detallaba una época, del año 1191 exactamente, que fue cuando ocurre la Tercera Cruzada, con personajes auténticos, con datos reales. Y el primer problema fue el dinero con el que yo contaba para hacer ese guión resulta que en la práctica no era ese. Entonces, las desavenencias con la productora eran claras. Porque yo no podía hacer el proyecto que había escrito, en una palabra ¿no? Y ante la posibilidad de hacer otro proyecto de otras características en el que yo no creía, pensé que era mejor más tarde. Pues bueno, ahí está, firmaron un papel por el cual, pues bueno, sin ninguna pelea realmente, porque antes de empezar las peleas casi diríamos que van a ocurrir en una producción tan grande, preferimos romper de mutuo acuerdo. Tengo que decir que, para variar, este señor, este productor, paga, cosa que no suele ocurrir muy de vez en cuando, y me marché esperando que alguien retomara el proyecto tal y como dijo el productor, pues dijeron que iban a hacer esta película con otro director. Va un año entero ahora y yo no sé si hay noticias por parte vuestra, que sois los que las recogéis, de que alguien la esté filmando, pero yo, desde luego, no tengo noticias ¿no? Y, a partir de entonces, me marché a Vitoria, como suelo decir: exiliado, no vivo en Madrid, un poco al margen de toda la industria en Madrid. Y continúo allí, escribiendo, o sea lo que hago realmente es por un lado escribir historias más que rodarlas, en principio. Alas de mariposa o La madre muerta eran películas que yo producía y que yo escribía y que eran pues más personales. Y, de otro lado, acepto encargos, como en su día Airbag, que fue un encargo que produjo otro y que valía más dinero del que yo podía conseguir, o El Capitán Trueno, que también era una cosa que producían terceras personas. Y ahora mismo llevo un año prácticamente un poco retirado, escribiendo. También tengo que decir que me han llegado algunos proyectos de los productores de Madrid y he dicho que pocas veces he visto guiones tan malos como los que se están haciendo últimamente y las ganas que me han quedado de aceptar algún proyectos pues... han sido nulas. Y sobre todo la cara que se me quedaba sabiendo que yo no aceptaba, porque no me interesaban, pero que iban a manos de otro que finalmente sí iban a rodar, que era un poco la imagen de lo que se está haciendo en nuestro país ¿no? Se está vendiendo muy bien todo el cine español, pero que realmente se esta yendo al cine, pues, a ver todas estas producciones que más éxito han tenido; algunos no sabes cómo pueden tener tanta cara [fragmento inaudible] Y, un poco, referir que estoy siempre esperando que llegue ese encargo maravilloso, pero que lo que llega no es gran cosa, o no se parece nada a lo que yo estaría dispuesto a hacer. Mientras tanto sigo escribiendo mis cosas en el absoluto de los retiros y en el más absoluto de los secretos.

Público: [inaudible; a Bajo Ulloa, sobre si estaría dispuesto a retomar el proyecto de El Capitán Trueno si cambian las condiciones]

Bajo Ulloa: La única razón por la que no hago el proyecto es porque las condiciones que se me daban para mí no eran las adecuadas para hacer una gran película de aventuras, que fue lo que se vendió. Si las condiciones cambiaran a ese nivel, hacer las cosas bien, como se ha hecho este libro, que es un libro que está bien hecho y que ha tomado su tiempo, entonces si la película se hace bien, como yo creo que hay que hacerla, y quizá podría llegar a plantearme el proyecto, pero no creo que eso ocurra. Quizás lo que ocurrió es que lo que yo pensé fue que uno de los géneros que no existían en el cine español era precisamente éste, el de aventuras, aventura épica en la que hay batallas, hay mucho gasto en vestuario, en localizaciones y demás. Y vemos que es un país que está absolutamente cercano... bueno, hay pueblos que son prácticamente como hace cinco o seis siglos, y encontrar decorados medievales, vestuario y demás es incluso más fácil que por ejemplo en otro país, como Estados Unidos, donde todo lo tienen que traer, o construir, o dibujar por ordenador. Yo pensaba que estábamos preparados para hacer esa gran película medieval de aventuras, épica y tal, pero en la práctica, cuando llegó la hora de la verdad, tras escribir el guión, me digo que quizás todavía estamos vedes para hacerlo, o al menos desde el punto de la producción. Entonces, mientras se siga en ese nivel de películas no de capa y espada sino de “caspa y espada”, pues yo no estoy dispuesto a firmar ese trabajo. Si cambian las condiciones... pero en principio lo veo muy difícil.

Dobladez: ¿Alguna pregunta más?

Público: [Inaudible; a Ortega Anguiano, sobre los valores de El Capitán Trueno hoy].

Ortega: Evidentemente, como producto de un tiempo, El Capitán Trueno recoge algo de esa cultura y de ese tiempo, pero de cualquier forma es curioso, porque yo lo leí cuando pequeño y a mí me gustó, y no hice ningún tipo de análisis, claro. Yo lo leía como un crío que iba a disfrutar un rato y a la hora de escribir el libro, volví a releerlo y me encontré con un montón de referencias a ideas de izquierda, hasta el punto de que incluso se dan consignas, lo que es entroncadas con la idea de la izquierda, con respecto a los trabajadores, con respecto a, no sé, a la libertad, a las clases sociales, a la diferencia de clases. Es curiosísimo porque además se dice casi sin paliativos, se dice así no más ¿no? Yo recuerdo que cuando me encontré con ésta, al darme cuenta de algo tan de paño impropio dentro de un cómic hecho en plena época franquista, pues me acuerdo que llamé incluso a Víctor Mora por teléfono, al guionista, y le hablé si esto lo había entendido bien, esos mensajes subliminales que él mandaba. Me dijo que efectivamente lo había entendido, porque por lo visto creo que allá por los años sesenta hubo un grupo de intelectuales y de creadores, un poco comprometidos con la idea de libertad y ellos hicieron de una forma un poco, sin organización de ninguna clase, hicieron una cosa que les llamaron ellos mismo el Posibilismo, que era una actitud creativa mediante la que ellos iban planteando cuestiones que chocaban frontalmente contra el sistema que había en ese momento, pero que de alguna manera procuraban por todos los medios que esas ideas pasasen la censura, es decir, el Posibilismo era que si existía la posibilidad de pasar la censura, pues mejor que mejor. Y, efectivamente, este hombre me lo confirmó porque ya digo que curiosamente, en la última parte de la colección de cuadernos está ya por el año 1966, 67, 68, pues en esa época que precisamente ya existían unos estatutos al menos de la censura, lo que es una censura organizada por unos estatutos, fijaros que algo tan irracional como eso lo había, pues esos estatutos censuraban prácticamente todo lo habido y por haber y sin embargo esto salió ¿no? Y está ahí.

Bajo Ulloa: Esto que tú estás contando lo has plasmado en el libro también.

Ortega Anguiano: Sí, sí, como por ejemplo decir de unos esclavos que están obligados a trabajar y no se les da de comer y dicen algo: “No se puede trabajar sin comer” ¿no? Frases como esa que, aquí..., entonces se rebelan, y hablan de libertad en esa rebelión y comienzan a rebelarse contra los propios amos en una época que yo creo que es algo valiente.

Bajo Ulloa: Se maquillaba con lo de “¡Santiago y cierra España!” para pasar, pero yo creo que había esas ideas.

Ortega Anguiano: Sí.

Bajo Ulloa: A mí me contó Mora que la censura llegó a ser tan absurda que después de haber  dibujado los puñales en una escena en que alguno le clavaba un puñal a alguien, o le tiraba una flecha a alguien, les hacían rasparlo con una cuchilla, manual, y entonces veían escenas, por ejemplo, en que alguien con un arco sin flecha, disparaba una no-flecha a un tipo al que le clavaba una no-flecha en la espalda y se oía “¡Ah, muero!”; y un tío cayendo con las líneas cinéticas dibujadas, pero no había nada. O un tipo clavándole un puñal a otro en la espalda, y le habían raspado el cuchillo o la espada, y quedaba el puño desnudo. Y quedaba así el cómic. Era una cosa absurda y surrealista, y cuando hoy te encuentras algunos de los cuadernos de esta época, te meas de risa. Yo recuerdo que nos decíamos ¿cómo, qué pasa, aquí falta algo? Que se habían olvidado, inocentemente. Y, ahora, sabiéndolo, es tremendo saber hasta que punto llegaba la censura.

Ortega Anguiano: Precisamente aquí, en la página 104, tenéis dos ejemplos de lo que se decía, de lo que dice Juanma. E incluso había veces que..., hay un insulto aquí, tapado con tipex posiblemente, incluso hay un insulto en la página 105, que tampoco no creo que fuese un insulto realmente malo para su tiempo. Aquí hay incluso lo que hablábamos antes del tema de la política. Se habló de que hay también una secuencia de viñetas en la página 103 en la que se habla que hay un éxodo de personas que se van de su país, y entonces le pregunta Crispín al Capitán Trueno que cuál sería la causa por que se quieren ir huyendo. Entonces dice el Capitán Trueno que solamente hay varias cosas que pueden obligar a huir a semejante multitud de personas: la peste, o la guerra, o la represión, que todavía estaba vigente. O sea, que decir cosas como estas..., la verdad que... Hay mucho que no se ha llegado a publicar, una imagen... Hay incluso una ilustración de Fuentesman que, perdonad el coloquialismo, pero es que hay una auténtica patada en los huevos a un criado de un señor, literalmente como digo. Eso me parece que eso no ha llegado al final a...

Ulloa: De hecho, Víctor Mora estuvo en la cárcel.

Ortega Anguiano: En la época en que aparece el personaje, allá por el número treinta y tantos, hay una época del final del 56 [1956], hay una época de cinco o seis meses que los guiones no los escribe Mora, sino Ricardo Acedo, otro gran guionista del tebeo español. Precisamente a Mora, que militaba en un partido pro catalanista, y estaba en la cárcel, y además también de trabajadores, era un partido de esa doble influencia, y precisamente está en la cárcel cuando no está haciendo el guión. Hay veces que había en algunos momentos de una colección, en las páginas de aquel tebeos tan famoso, también hay una referencia incluso a los verdugos, a los que posiblemente le pegasen a Víctor Mora, también, como es natural ¿no? Que se pone en boca de uno de los protagonistas de aquella aventura, se habla algo así como gracias precisamente a esto, es decir a esa policía con que se desarrolla en la India esa aventura, la policía del majarajá, gracias a la libertad que les ha dado, son los que le mantienen el terror y los que le mantienen en el poder ¿no? Hablar de esto en el año 56 es que es realmente fuerte.

[Se interrumpe aquí la grabación. La presentación terminó a los pocos minutos]

MÁS INFORMACIÓN SOBRE LA PRESENTACIÓN: 

GARCÍA HIGUERAS, J. (2001): “El Capitán Trueno reúne en la ciudad a Ortega Anguiano y a Juanma Bajo Ulloa”, en Diario de Córdoba \ Cultura, p. 58, 28-XII-2002 [texto a tres columnas, bajo gran fotografía alusiva a la exposición Simple World, Killer Toons, Androito Ke-ke: Una retrospectiva del cómic en Córdoba]

RECUERDA HITA, V. (2002): “Una obra profundiza en la vida del ‘Capitán Trueno’”, en Diario de Córdoba \ Cultura, p. 48, 5-I-2002 [texto a cuatro columnas, a toda página, con fotografía de Juanma Bajo Ulloa, tomada por Lola Araque; las más extensa información sobre la presentación, que acompaña declaraciones de Ortega como: «los más de 600 ejemplares editados están teniendo una gran acogida entre el público», «figuras como las del Capitán Trueno son refugio de la reproducción naturalista». También aporta una pequeña entrevista a Ulloa ]

ASENSI, A. (2002): “Un cordobés desentraña el universo de ‘El Capitán Trueno’”, en El Día de Córdoba \ Cultura \ Libros, 5-I-2002 [texto a cuatro columnas, con foto de José A. Ortega, tomada por M.A. Salas]

ASENSI, A. (2002): “Un superhéroe de la historieta nacional”, en Diario de Sevilla \ Cultura, p. 43, 5-I-2002 [texto a cuatro columnas, con foto de José A. Ortega, tomada por M.A. Salas]

CAMACHO, I. (2002): “Redondo y el Capitán Trueno”, en ABC de Sevilla \ Opinión \ Una raya en el agua, p. 4, 14-I-2002 [texto a dos columnas; sección de Ignacio Camacho, sobre la actualidad política, en la que alude a la obra de Ortega diciendo: « (...) un libro recién publicado en el que se analizan los mensajes ideológicos del famoso cómic para concluir que su autor, un hombre de la izquierda derrotada en la guerra civil, introducía en las épicas aventuras del héroe alambicadas perspectivas de protesta encubierta contra los valores de la dictadura. (Para curiosos y aficionados a la entomología intelectual, «El capitán Trueno, un héroe para una generación». De José Antonio Ortega).»]


VÍNCULOS:

Ficha del libro de José Antonio Ortega Anguiano.

Leer sobre la repercusión de la siguiente presencia de Bajo Ulloa en Andalucía.


[ Trascripción y ficha: M. Barrero, para Tebeosfera 020430. Registro fonográfico cedido por A. Jiménez Reyes ]