LA IMPORTANCIA DE LA
MEMORIA.
Antes que nada,
quisiera hacer una merecida aclaración a quien lee estas palabras: yo no
soy un experto en el tema Mordillo. Ni siquiera sé escribir artículos de
información. Simplemente, soy un dibujante argentino que se lanzó a la
aventura de convocar a todos los colegas del mundo (gracias a las
bondades del correo electrónico y de sitios como Tebeosfera,
Humoralia, Fan de Comix, El Can y otros que se suman a la movida)
para realizar un lindo homenaje a Mordillo en el club Ferro Carril Oeste
de Buenos Aires (institución deportiva que este gran artista ama desde
su niñez) en el próximo año 2003.
¿Qué me motiva a
llevar a cabo este proyecto? Un hecho fundamental: los argentinos
tenemos la obligación de reconstruir un país devastado por sus propios
habitantes. Porque no nos engañemos, hay que reconocerlo... estamos como
estamos porque el pueblo votó a personas incapaces, mentirosas y
corruptas que hace más de 30 años vienen haciendo oídos sordos a los
reclamos de los trabajadores, de los docentes y de los jubilados. en el
caso particular de los dibujantes (que es el que nos compete), se trata
de reconstruir un oficio (el humor gráfico y la historieta) y el
deteriorado mercado local. ¿Revistas de humor? En la actualidad muchas
de las revistas de humor argentinas son autoeditadas (como El
Garrotazo), y solo hay unas pocas en el interior del país (Salta
la Risa)... ¿Revistas de Historietas? Solo existen republicaciones
de Patoruzú y algunas más; el resto son todos intentos de
autoedición (La Productora, Tirapia), sobrevivientes de lo
que fue un gran mercado...¿Revistas para niños? Quedan dos a nivel
nacional: Genios y Billiken. Anteojito, un baluarte, cerró
sus puertas a principios de este año, tras casi cuarenta años de
publicar historietas para chicos. Para el humor gráfico, quedan los
periódicos: sus contratapas (Clarín, La Nación) y sus suplementos
de humor (Página 12; La Voz del Interior), pero
lamentablemente, la tirada de los mismos bajó un 50 % o más con respecto
a años anteriores. ¡Y claro! Si la gente no tiene dinero para
comer...¡Menos dinero tendrá para comprar una revista de cómics! Si
comparamos estas cifras con los 250.000 ejemplares semanales que editaba
la revista de humor Rico Tipo en los años cincuenta, no caben
dudas que estamos al borde del abismo, si es que no nos encontramos ya
en el fondo del mismo.
Señor lector: el
oficio del dibujante en Argentina se está muriendo. Ojo que no hablo de
"arte", sino de "oficio": el trabajo de realizar una historieta o un
cartoon de manera remunerada. Porque si no hay mercado el dibujante
deberá dedicarse a otra cosa... Esta es la situación, la que debemos
revertir. Los argentinos tenemos la obligación y el deber moral con
nuestros descendientes de reconstruir un país... Pero para eso, lo
primero y principal es recuperar la memoria. Porque un país sin memoria
nunca va a crecer o desarrollarse, porque va a repetir sus errores por
siempre. Y los homenajes (como éste al gran Mordillo) sirven para eso,
para recuperar la memoria, para tenerla viva, siempre presente. Los
profesionales del dibujo aprenden mucho mirando a los clásicos, y hay
que mostrarles lo que ellos hacen. No podemos empezar a crear cosas
nuevas, si antes no revaloramos a quienes nos precedieron, nuestros
cimientos, nuestros Maestros... Mordillo es uno de estos pilares, como
Quino, Lino Palacio, Alberto Breccia, José Luis Salinas, Eduardo Ferro,
Héctor Torino, Héctor Oesterheld, Guillermo Guerrero, Oski y una lista
infinita. Y ese cariño y ese afecto por una trayectoria, por una vida
dedicada a su arte, hay que hacérselo sentir a su autor en vida, para
que pueda seguir creando por muchos años más.
MORDILLO:
EL GRAN MAESTRO DEL HUMOR Y DEL COLOR.
No sé por qué razón,
pero desde pequeño me interesé por la obra de Guillermo Mordillo. Tal
vez porque desarrolla un tipo de secuencia gráfica muda, sin textos, con
un dibujo redondeado y colorido, donde todo parece blandito o de goma.
Una estética que me atrajo de niño, y que aún hoy lo sigue haciendo. Y
esos cálidos recuerdos de niñez en los cuales reía con sus dibujos (y
con los "Trok Trok" del español Jan, y los libros de Quino, y los
Asterix y...) fueron el detonante para desear que algún día le
agradecería a este tipo, de alguna manera, esos lindos momentos que me
regaló gratuitamente, sin saberlo...
El niño de aquel
entonces creció, se chocó con la vida y, tras los sucesos ocurridos el
19 de diciembre pasado en la Argentina, sintió la necesidad de construir
algo... cuando uno se percata que a su alrededor un país se derrumba,
toma fuerzas para, aunque sea, poner en pie un castillito de naipes.
Construir ante la adversidad de los hechos. Comencé a husmear en mis
libros de investigación sobre el humor gráfico e historieta argentinos (Historia
del Humor Gráfico y Escrito de la Argentina, Volúmenes I y II, por
Siulnas; Historia de la Historieta Argentina, por Carlos Trillo y
Guillermo Saccomanno, Historia del Humor Gráfico, por Trillo y
Alberto Bróccoli); en entrevistas realizadas a Mordillo desde 1988 hasta
la actualidad, publicadas en importantes medios de comunicación
(periódicos como La Nación, Clarín, La Maga) y mantuve charlas
con algunos profesionales amigos de Mordillo, como el gran dibujante de
animación (pionero en el país) Ubaldo Galuppo. Sumemos los hechos
mencionados, y el resultado es el “Homenaje a Mordillo”, que hasta ahora
está solo en el sitio web http://ferrotoons.8k.com, y que el
proyecto además consta de un pequeño agasajo a Mordillo el año próximo
en el club Ferro.
Hay un momento en la
vida de Mordillo que me llena de curiosidad y espero algún día sentarme
frente a él en un café y charlar sobre el tema. Se trata de su infancia
y juventud en Argentina, desde sus inicios en la profesión hasta su
partida hacia otros rumbos, en 1955, que primero fue a Perú y luego a
Estados Unidos y Europa. En el informe que escribí sobre su carrera en
el sitio de Ferro Toons Web, titulado "Algunos apuntes no oficiales de
su trayectoria profesional", dividí la trayectoria de Mordillo en cinco
etapas, en donde cada una merecería un volumen propio. Las tres primeras
etapas son referidas al Mordillo "prehistórico", a ese Mordillo que
todavía no dibujaba sus clásicos personajes “narigones y blancuscos",
que vive su etapa de formación profesional trabajando en historietas
humorísticas, en publicidad, tarjetas de felicitación y dibujos
animados. La primera etapa la llamé "Nace el Mordillo dibujante y
verdolaga" y abarca toda su trayectoria y formación en Argentina (y su
afición por el equipo de fútbol Ferro Carril Oeste, pequeño club de
barrio de camiseta verde, de ahí el mote "verdolaga") hasta su partida
al Perú, en donde comienza la segunda etapa, que dura unos cuantos años,
y que la denominé "La Aventura Peruana". Luego le continua su marcha a
USA: "La Aventura Norteamericana", y recién en la cuarta etapa es donde
nace el Mordillo que todos conocemos: "Nace el Mordillo Humorista", que
es cuando arriba a Francia, en los años sesenta. La quinta etapa, abarca
toda la trayectoria de Mordillo desde los ochenta hasta hoy: "Mordillo
Contemporáneo".
PETER PAN, EL CONEJO
FOSFORITO Y COLAVERDE
Uno de los primeros
trabajos realizados por el joven Mordillo en Argentina (a los 23 años de
edad), son unas muy simpáticas y divertidas historietas orientadas hacia
el público infantil, editadas por el sello Editorial Codex, una pujante
editorial que confeccionaba un sin número de libros por aquella próspera
década de los cincuenta.
Tengo en mi poder un
ejemplar de la revista Peter Pan, de la editorial mencionada, con
fecha de publicación del 4 de enero de 1955, Año 4, Número 35. De
pequeño formato vertical (apenas 20 × 14 cm.), este ejemplar posee en su
tapa una ilustración realizada por Mordillo con 3 de sus personajes: El
Conejo Fosforito, su amigo Osito y su primo, el malvado Conejo Negro.
Esta tapa hace referencia a la historieta central de la revista, también
dibujada por el propio Mordillo pero con guiones de un gran cómico
argentino: Aldo Cammarotta. El "Conejo Fosforito" como así también el
resto de historietas que contiene la revista (5 en total, cuya autoría
no es mencionada), están influenciados gráficamente por los funnies
animals, tan en moda en aquellos tiempos gracias a la labor de
dibujantes de Disney como Floyd Gottfredson, Al Taliafierro, Carl Barks
y otros. Historias sencillas, simples, pasatistas, en donde las
persecuciones entre el malo y el bueno (a lo Tom & Jerry) son el
eje central de las aventuras.
También, dentro de
este número, encontramos un cuento infantil titulado "Colaverde y las
sombras", que nos interesa mencionar ya que está ilustrado por "Mor",
que no es otro que Mordillo. Hay muchos trabajos firmados de esta
manera... existe un cartel publicitario del vehículo infantil Sulky
Ciclo dibujado por Ubaldo Galuppo en conjunto con Mordillo, aparecido en
la revista Billiken, cuya firma es "Mor-Galu". Debido a las limitaciones de la impresión,
se nota que el artista no podía lograr el volumen con el color al que
acostumbra en la actualidad ya que está aplicado de manera plana. Pero
si observamos con atención los árboles que acompañan el paisaje, se ve
un acercamiento del joven autor a la redondez de los dibujos que realiza
en la actualidad.
1955-2002. 47 años de distancia, pero unidos por la
trayectoria inmensa de este artista, que merece hoy más
que nunca ser reconocida en España (Catedrático Honorífico por la
Universidad de Alcalá, nada menos), en Argentina y en todo el mundo ¡Es que Mordillo, es el "Gran
Maestro del Humor y del Color"!
Y recuerde, querido
lector: "Si sabemos de dónde venimos, sabremos a dónde vamos..." Eso
Mordillo lo sabe, ya que nunca olvidó sus raíces argentinas, siempre
valoró a sus predecesores, siempre mantuvo una memoria viva, activa y
presenta, esté en el lugar del mundo que se encuentre. Sigamos su
ejemplo. |