Cuaderno con ocho páginas en color. Colección de 41 números ordinarios más uno extraordinario fuera de numeración: ALMANAQUE 1938, éste con 66 páginas. No constó sello editor, solamente la dirección de su redacción (Pelayo, 56) y la mención de su distribuidora, Sociedad General Española de Librería. Se menció al redactor Pepe de Casas Novas en el número 38.
Yo, "semanario infantil", fue una publicación de los editores Esteller y Sangés, distribuida por la Sociedad General Española de Librería, que duró dos años, 1937 y 1938, interrumpiéndose a la altura del número 41 presuntamente por el desarrollo de la Guerra Civil y dejando inconclusas algunas de las series que ofrecía. Iba dirigidia a la infancia, para forjar "ideas de humanismo y de respeto hacia tus semejantes" (núm. 1, p. 2), en un periodo de la historia de España en el que gran parte del público lector de historietas en España estaba sumido en la desesperación. Sus mensajes encubrían propaganda (en los relatos fundamentalmente, aunque también en alguna historieta) pero nunca llegó a ser el eje de la publicación. Rescató el modelo instaurado por TBO: secciones escritas mezcladas con historietas a modo de aleluyas, casi todas de carácter cómico, fabulístico o histórico, pero que incorpo además obras de aventuras fantásticas. De sus doce páginas, cinco iban dedicadas a relatos, textos didácticos (incluso recetas de cocina o modelos de sastre) o pasatiempos, y toda ella era impresa en color.
El dibujante más descollante de la publicación fue G. Barba, que aportó algunas historietas avanzadas a su tiempo y que trabajó tanto en aventuras de clara inspiración americana (como Aventuras de sir James Pik, desde el núm. 1). Le siguieron en importancia Xirinius (Aventuras del Rey Feliz), F. Nel-lo (la serie Pacucho, resuelta con pobres recursos), Sacha (la serie inspirada en Flash Gordon En busca de la vida eterna), Fresquet (las series históricas algo abigarradas: Paso al rey y Morena..., Blanca... Morena!!), Darnís (con El pájaro Fantástico), Carles (El hambre aguza el ingenio, un claro precursor de Carpanta), Antón Roca (en una serie sin título, resuelta con estilo vanguardista) y otros autores con serie sin título fijo: Sabatés, Rosa B., Quelus, Fraga, Hernández, Maciá, C. Cifré, De`ri o el interesante Fernand, que aportó muchas páginas de corte histórico. En las portadas destacaron las historietas de R. Bataller, y Rius descolló en las ilustraciones. En el almanaque colaboraron también Benejam y Ayné.
Barba desarrolló una gran labor en esta publicación: se ocupó de ilustrar relatos, las de las secciones literarias ilustradas Novelitas de Yo y Cuentos de Yo en los primeros números, y también elaboró otras historietas independientes ("Monda Cocos el terrible", por ejemplo), y series como Helena y Roberto, desde el núm. 4, con elementos de terror romántico, En busca de la vida eterna, aventura fantástica que tomó de manos de Sacha a partir del núm. 21, Los misterios de otro mundo, desde el 23, una aventura subterránea verdaderamente dantesca, y X-3. El secreto del difunto Dr. Flind, desde el 35, que basculaba entre el espionaje y el terror.