Información de la editorial:
En mi caso particular, fui un niño español que gustó de ver corridas de toros por televisión. Supongo que todos los que vivimos la época del blanco y negro recordamos lo alucinante que fue la primera vez que vimos una televisión en color. Lo que yo no olvidaré es el día en que me dí cuenta que aquella mancha brillante que cubría gran parte del cuerpo del toro era de color ROJO.
Todos tendremos nuestras razones, sensibilidades, experiencias y puntos de vista, pero ¿qué piensas tú? ¿Eh, Toro?