El día en que estalló la segunda estrella de la muerte, consiguió escapar de un grupo de mineros que esclavizó a los habitantes de Moss Pelgo, en el plante Tatooine. En su exilio consiguió adquirir la armadura de Boba Fett, con la que regresó a su pueblo. Tras enfrentarse a los mineros y salir victorioso, liberó Moss Pelgo, donde actualmente se desempeña como comisario, manteniendo el orden.