LA DECONSTRUCCIÓN DEL HÉROE INTERIOR Reseña de Es un Pájaro... de Steven T. Seagle y Teddy Kristiansen |
Es un pájaro..., de Steven T. Seagle y Teddy Kristiansen es un cómic que reflexiona sobre la figura de Superman y sobre la vida del autor para plantear al lector una cuestión: ¿Necesitamos héroes? A través de una historia personal, Seagle ofrece al lector una obra brillante, significativa y conmovedora, un catártico viaje interior que le convertirá en el héroe de su propia épica.
Detalle de la página 10, Seagle recuerda su infancia. |
La deconstrucción
Con portentosa maestría y sobriedad, el relato combina la deconstrucción (recurso característico, aunque no exclusivo, del arte postmoderno) con la épica tradicional. Una de las características de la postmodernidad es la deconstrucción de los “grandes- relatos”. François Lyotard denominó así a todas aquellas teorías e ideologías que trataban de describir la realidad como un relato coherente que legitimaba el progreso de Occidente. La historia, la ciencia, la religión… todas servían para enmarcar los acontecimientos históricos dentro de la idea de “progreso” y formulaban teorías y leyes que parecían ser capaces de explicar y conformar lo caótico de la existencia. Con las guerras mundiales, los procesos de descolonización, la crisis del 29, etc., esa idea de “progreso” y de un Occidente todopoderoso ha dado paso a la pluralidad y la relatividad. Así, se escuchan voces que antes eran silenciadas, se adoptan perspectivas diferentes que cuestionan todo lo que antes parecía inalterable, y nuestras ideas sobre el poder, la religión, la identidad o la sexualidad se ponen así en entredicho.
En Es un pájaro... asistimos a la deconstrucción del mito del cómic por excelencia –Superman, el símbolo (entre otras cosas) del espíritu americano: “Eres tan americano como el jazz, el béisbol o los cómics” (p. 43), dice Seagle, y a lo largo del cómic se cuestiona la validez del superhéroe como representación del estilo de vida americano, como personificación de la masculinidad, del ciudadano modelo, del inmigrante que busca la tierra de la libertad, “de los ideales metafísicos… verdad, infinito, fe…” (p. 44), etc. Superman se presenta como el hombre hecho a sí mismo, el triunfador, la encarnación del sueño americano, y Seagle lo destruye con sorprendente habilidad.
La deconstrucción del mito en "Rojo, amarillo, azul" (p 43 y 44). |
La disección de Superman no es sólo una crítica al sistema estadounidense, sino también al mito del superhéroe en el cómic. En el relato titulado “Kriptonita”, la voz del narrador comenta: “¿Eres un villano que quiere derrotar al hombre supremo? ¿Eres un guionista que intenta salir del atolladero en el que se metió al crear un superhombre? ¿Un ser tan poderoso que el único modo de derrotarlo es sacarse de la manga un deux ex machina que despoje al dios de su divinidad? ¡Kriptonita! Dejarás sin ‘super’…al ‘hombre’” (p. 39). En este y otros relatos se ponen al descubierto las carencias del guión de Superman y su aparente simpleza para socavar el que es probablemente el mayor mito (y durante algunas décadas, el más rentable) de la industria del cómic. Además, este proceso de desmitificación es una reflexión sobre el paso de una temática de lo extraordinario (el género de superhéroes americanos, los cómics de aventuras europeos, los de fantasía, etc.) a otra de lo ordinario, de la vida diaria (como las biografías y autobiografías) en el mundo del cómic. Probablemente la mayoría de los lectores de cómic habrán notado que en los últimos años, y sobre todo en las últimas dos décadas, ha habido un incremento de tebeos con una temática que huía de lo sobrenatural. Así, el mercado se ha ampliado para dar cabida a otro tipo de relatos y, en consecuencia, de público, que consume una narrativa distinta a la del superhéroe. El propio Seagle podría ser uno de estos consumidores, ya que, según cuenta, de pequeño, a su hermano y a él les “divertía rechazar todos los cómics que [les] ofrecían. [Leían] libros de verdad”. La imbricación de la temática del superhéroe y de la vida del autor en Es un pájaro... es un interesante comentario acerca de este cambio en la industria del cómic. Metafóricamente refleja la convivencia de ambas tendencias en el mercado, aunque resulta significativo que el relato sobre Superman esté insertado dentro de la autobiografía del autor. ¿Quiere esto decir que los relatos sobre lo ‘ordinario’, sobre lo trivial de la existencia diaria, absorben o superan al género de lo sobrenatural? En cualquier caso, no cabe duda de que cada género tiene su propio público y de que el de superhéroes sigue vigente (por suerte). De hecho, Es un pájaro... comienza como una deconstrucción y una destrucción del mito de Superman, pero finalmente se revela como una obra de rescate y revalorización del mismo. Aunque la persona autobiográfica de Seagle manifieste en repetidas ocasiones su aversión por el superhéroe y ofrezca innumerables razones para justificar su rechazo, todos estos argumentos conducen a la recuperación final del mito, al descubrimiento de la faceta más importante de todo héroe tradicional: la esperanza, el rasgo que salvará en último término al protagonista (tanto de Superman como de Es un pájaro...). Seagle encuentra así un lugar para el superhéroe en su vida y en el mercado. En este sentido, Es un pájaro... se puede considerar un discurso sobre la figura del superhéroe en el cómic, sobre su papel en el medio, sobre su reubicación y su vigencia.
Otros dos ejemplos de las disgresiones que diseccionan el mito, "Kriptonita" (izda.) y "Huida de Kriptón" (dcha.). |
La autobiografía
La autobiografía es un arte curativo que permite dar sentido a aquello que nos atemoriza. Marilyn R. Chandler lo demuestra en su influyente ensayo sobre este género, y según sus propias palabras: “Diseñar y contar una vida es una actividad purgativa, constructiva, integradora y transformadora. Los requisitos básicos de la narrativa (pauta, estructura, cierre, coherencia, equilibrio, etc.) comprometen al escritor a crear un todo a partir de los fragmentos de la experiencia”. La confección de Es un pájaro... sigue esta pauta, entretejiendo fragmentos de otra narración, la de Superman, para reconstruir la vida de su autor y enfrentarse al temor de padecer Huntington.
Los hermanos leen un cómic de Supermán mientras su abuela fallece de Huntington. |
El cómic comienza con una anécdota de la infancia del escritor que explica la razón de que Superman y el Huntington queden estrechamente unidos en su vida. Cuando él y su hermano eran pequeños, su abuela falleció de Huntington. En el hospital, mientras esperaban sentados en el pasillo, su padre les compró un cómic de Superman que les “hizo de canguro” (p. 21). La historia contenida en aquellas páginas tenía un final feliz, en el que Superman salía victorioso y todo volvía a la normalidad. Sin embargo, su realidad tuvo un final muy distinto: su abuela murió, y su padre, al descubrir que esa enfermedad era hereditaria, dijo: “De haber sabido lo de la dichosa enfermedad, no habríamos tenido a David ni a Steve” (p. 114). Desde aquel momento, el joven Steve comienza a odiar los cómics, sobre todo los de Superman.
Los recuerdos del autor del cómic de Superman (izda.) y la revelación que le haría odiarlos (dcha.). |
Unos años después, ya como guionista de cómics profesional, recibe la llamada de su editor con un encargo: escribir Superman. Seagle lo rechaza desde el primer momento, pero la insistencia de su editor le obliga a reflexionar tanto acerca del trabajo como de lo que el superhéroe representa en su vida. “Me enfrentaré a Superman”, dice el personaje de Seagle. “Ya veremos quién es más fuerte” (p. 34), y así comienza el reto. Mediante relatos cortos intercalados con la narración de su propia vida, el autor analiza distintos aspectos del héroe y de su miedo a padecer Huntington. En cierto modo, estos relatos son una forma de desmembrar y destruir al superhéroe que Seagle tanto odia, y con él a la enfermedad, pero también constituyen una serie de metáforas de una extraordinaria riqueza simbólica. Engarzadas en la narración biográfica, funcionan como digresiones que se suman al relato principal para comentar aspectos de su propia existencia e ilustrar, metafórica y visualmente, las implicaciones de ciertos sucesos en su vida.
La proposición del editor (izq.) y la aceptación del reto (dcha.). |
Por ejemplo, la primera de ellas, el relato sobre el joven Jason Dobson, aborda la temática de la identidad y la decepción. Jason es un joven sin amigos que pasa desapercibido para todo el mundo, incluidos sus profesores. Un día, en Halloween, se disfraza de Superman, y por primera vez en toda su vida obtiene el reconocimiento y la atención de sus compañeros que tanto había anhelado. Sin embargo, al día siguiente vuelve a ser invisible tan pronto como todo vuelve a la normalidad. En un intento por recuperar la atención de la que una vez disfrutó, decide ponerse de nuevo el traje de Superman, pero en esta ocasión en un día de escuela. Sus compañeros se ríen de él y es expulsado durante dos semanas.
Página 16 con el primer relato, "El traje". | Página 15 donde el autor interpela al lector. |
A nivel biográfico, este relato viene a constituir un discurso sobre la doble identidad del autor, de la carga que supone guardar el secreto del Huntington y de la culpabilidad que le hace sentir ocultándolo a aquellos que le rodean. Así, para introducir la historia sobre Jason, el narrador se dirige al lector para preguntarle: “¿Conocéis a alguien que se tome en serio a un tío disfrazado?” (p. 15) Para todos aquellos que no conocen el secreto del autor (su novia, sus amigos más cercanos, su editor, etc.), él lleva un disfraz. Pero su identidad oculta, su alter ego, no es un patoso inocentón como Clark Kent, sino un hombre atormentado por la posibilidad de sufrir una terrible enfermedad. Es una metáfora sobre la dificultad que para Seagle supone mantener su enfermedad en secreto así como asimilarla como parte de su vida.
Para expresar visualmente la separación entre el presente, las digresiones, y el pasado, el estilo de las viñetas y de los marcos varía. En este punto hay que destacar la labor de Teddy Kristiansen, cuyos diseños expresan a la perfección el tono y los matices de la narración. Así, la autobiografía, el nivel diegético que abarca todos los demás, está enmarcado en viñetas negras, cuadradas y rígidas. Este estilo se podría interpretar como una metáfora visual de la vida de Seagle, pues su mundo está literalmente encapsulado en pequeños compartimentos separados y de carácter oscuro, serio y racional como él mismo. Al tratar el pasado, los bordes y las imágenes se difuminan, como recuerdos que se desvanecen con el tiempo. El resto de las imágenes varían según el tema abordado en cada una de las historias sobre Superman, ya que, como ya hemos señalado, constituyen digresiones de la trama principal y funcionan como reflexiones aparte. Sin embargo, tal variación puede expresar también la dificultad que entraña para Seagle integrar el Huntington y la figura de Superman en su propia vida. Cada historia trata uno o más aspectos que el escritor no puede asimilar totalmente ni sobre Superman ni sobre el Huntington. Estas narraciones rompen literalmente los paneles negros cuadrados de la narración principal, el ordenado entorno donde se desarrolla la vida del protagonista. Así pues, reflejan visualmente reflexiones aparte, pero también asuntos problemáticos que escapan al control del autor.
Dos ejemplos de la variedad de estilos utilizados por Kristiansen en las disgresiones que salpican el relato. |
En estos paréntesis se observa cómo el autor va cambiando progresivamente de parecer con respecto a la figura de Superman, y si las primeras historias cortas desmiembran al superhéroe, los últimos relatos le reconstruyen. Asimismo, si la figura de Superman personificaba los temores del autor con respecto al Huntington, esta transformación expresa una progresiva asimilación y superación de los mismos. La catarsis llega en el encuentro que mantiene con su padre en el hospital, cuando descubre que su tía Sarah ha desarrollado la enfermedad. Su padre había estado cuidando de ella sin que ni sus hijos ni su mujer lo supieran. Mantenerlo en secreto es fruto de su miedo al rechazo y a la vergüenza de padecer Huntington, pero también es un intento por evitar preocupaciones a su familia, ya que si su hermana Sarah padece la enfermedad, él probablemente también, y por tanto sus hijos, Steven y David.
El tono de las historias cortas cambia según avanza el relato. |
La reconstrucción
La reunión entre padre e hijo causa una confrontación que termina en pelea, y Seagle, al enfrentarse a su padre y ver reflejados en él los mismos temores que le paralizan, obtiene la clave al fin para superarlos. En este momento de catarsis se incluyen los dos últimos cuentos, “Escape” y “Héroe”, que tratan sobre el rasgo más importante de todo héroe: la esperanza. “Escape” describe la muerte y resurrección de Superman, y afirma que “para eso están los cómics, para hacer un uso deliberado de lo imposible” (p. 117). Para Seagle, el carácter evasivo de la fantasía ha sido hasta ese momento un acto de cobardía y de negación de la realidad que ahora se presenta de otra manera mucho más positiva. Como Tolkien comenta en Tree and Leaf (1964), condenar lo fantástico a ser un mero sinsentido evasivo es confundir “la evasión del prisionero con la huida del desertor” (p. 61). La evasión también puede ser un acto de resistencia incluso heroico, pues implica el potencial subversivo de lo utópico. “El uso deliberado de lo imposible” es, de hecho, una forma de subvertir la realidad, ya que, en lugar de dar el mundo y las circunstancias por sentados, la fantasía ofrece una imagen de los mismos llena de posibilidades. La fantasía que encarna Superman recuerda al lector que “un hombre […] puede salir airoso de todo lo que le echen” (p. 117), así que esta evasión ofrece además el poder de la esperanza. Por ello, Seagle, en lugar de considerar el Huntington como un destino aciago, decide por fin aceptarlo y disfrutar del presente al máximo. Así, la enfermedad deja de ser una pesada losa para convertirse en el catalizador de una nueva forma de vida llena de esperanza.
Páginas 121 y 122 con el cuento titulado "Escape". |
En “Héroe”, Seagle vuelve a su pasado y arroja nueva luz sobre el trauma de su niñez. En este cuento describe el cómic de Superman que un día hojeó en el hospital donde estaba su abuela y que desde entonces quedó irremediablemente unido al miedo a la enfermedad y al supuesto rechazo de su padre. La trama de aquel cómic no tenía nada de especial, pero les conmovió profundamente a él y a su hermano. Aquella historia, aun siendo simple, comunicaba un claro mensaje de esperanza: “Que siempre hay un ‘continuará’. Para eso está Superman. Para recordarnos que hay obstáculos, pero que mientras los vayamos saltando seguimos en la carrera” (p. 121). Como Ernst Bloch argumenta en su épica obra maestra The Philosophy of Hope, los cuentos de hadas, los mitos y la cultura popular contienen momentos de emancipación que ofrecen la posibilidad del progreso y el cambio. Para él, “prácticamente todos los seres humanos son futuristas; trascienden su vida pasada… y consideran su insuficiencia como una barrera, y no sólo como el funcionamiento normal del mundo”. El ‘continuará’ de los cómics de Superman consiste en mirar al futuro con esperanza. La lectura que Seagle hace aquí de Superman es, de hecho, una interpretación “Blochiana” del héroe, una filosofía de la esperanza. A partir de este momento, Seagle se convierte en el héroe de su propia épica, y con este optimismo acepta el trabajo de guionista de Superman y supera su trauma con respecto al Huntington y a las palabras de su padre.
Páginas 119 y 121, primera y última respectivamente de "Héroe". |
Es un pájaro... constituye a partes iguales una interesante deconstrucción del mito del héroe y una épica. A lo largo de la obra, los numerosos relatos cortos que sirven como reflexiones en torno a la figura de Superman diseccionan sin pudor el que probablemente es el mayor mito del cómic americano. Sus innovaciones formales lo acercan a la producción postmoderna, y en este sentido, Es un pájaro... constituye también un discurso metaficticio que pretende subvertir y cuestionar el género de los superhéroes y su papel en el mundo del cómic. A su vez, la biografía del autor conforma una épica cuyo éxito le transformará en el héroe de su propia narración. Ambos discursos se imbrican a lo largo de la obra hasta la catarsis final para producir un relato original y extraordinariamente rico.
REFERENCIAS
Bloch, Ernst. 1986. The Principle of Hope. 3 vols. Translated by Neville Plaice, Stephen. Plaice, and Paul Knight. Cambridge, Mass.: MIT Press.
Chandler, Marilyn R. “A Healing Art: Therapeutic Dimensions of Autobiography”. Auto/Biography Studies, vol. V, 1 (1989).
Seagle, Steven T. y Kristiansen, Teddy, 2004. It’s a bird..., New York: DC Comics.
Smith, Sidonie and Julia Watson, 2001. Reading Autobiography: A Guide for Interpreting Life Narratives, The University of Minnesota Press.
Tolkien, JRR., 2001.Tree and Leaf, London: Harper Collins Publishers.