EL SECRETO DEL PORVENIR DE LA HISTORIETA
MANUEL BARRERO

EL SECRETO DEL PORVENIR DE LA HISTORIETA

 

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 Muestra del mágico trabajo de Alfonso Font
Con ocasión de la inauguración del equipamiento de Alhóndiga Bilbao, que es un centro de usos múltiples orientado al ocio y a la cultura habilitado en un emblemático edificio sito cerca de la Alamenda de Urquijo, se ha lanzado un tebeo. La idea consistía, según la organización, en "desarrollar la creatividad" y apoyar así la inauguración de la Mediateka, un espacio para el acceso múltiple a la cultura. El tebeo resultante, titulado El secreto de Alhóndiga Bilbao, es un estupendo álbum de historietas bien editado por Astiberri y coordinado por Antonio Altarriba, persona que cuando no está ganando premios se dedica a escribir literatura o a hacer tebeos.

Altarriba fue quien eligió a los autores que integran este experimento, consistente en construir una historieta conexa con la idea o con la estructura de la Alhóndiga, o bien en el contexto de su actual significación como centro de convergencia de arte, cultura y entretenimiento. Y la elección de autores llama poderosamente la atención: Alfonso Font, un autor maduro de nuestra historieta y fiel a los estilemas de siempre americanos; Daniel Torres, otro clásico ya, pero dueño de una línea más fiel a los autores europeos; Laura Pérez, de estética más propia y menos influida por otros; Miguel Ángel Martín, un gran dibujante leonés que se ha caracterizado por lo transgresor de sus propuestas; Paco Roca, hoy en día "el" historietista español y dueño de un estilo que procede de registros autóctonos; Raquel Alzate, joven autora que vive a caballo entre la ilustración y la historieta; Santiago Valenzuela, nuestro "indie" más interesante; Javier de Isusi, autor bilbaíno y narrador de viajes, y David Rubín, el más joven de todos los invitados, un gallego bendecido por las musas.

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Plancha de la intensa historieta de Valenzuela  
La heterogeneidad del conjunto es manifiesta. Y así es el resultado. Font hace el dibujo más limpio, planteando una presentación de espacios antaño destinados a la lonja que ahora se llenan de magia. Torres construye un universo ficticio fundamentado en el diseño (Bilbao entendido como un planeta, el logotipo "hó" convertido en edificio) que culmina con una promesa. Laura adapta a Kafka para atrapar a un personaje, un trapecista, en sus inseguridades. Mrtn construye un relato sobre un suicidio para contribuir a la idea de que Alhóndiga Bilbao atesora un increíble secreto. Paco Roca vuelve a atraparnos en esos detalles de intimidad que tan bien sabe captar para, de paso, ironizar sobre el origen de los diseños de lo nuevo. Alzate imagina un escenario terrorífico y extraño para hablarnos de la nueva vida de un edificio. Valenzuela describe un mundo en el que las ciudades se obstinan en preservar sus ruinas. De Isusi muestra los múltiples usos del edificio mediante cortes verticales y varios montajes en paralelo. Y Rubín formula en tono fantástico la angustiosa incorporación a un nuevo espacio en cuyo derredor todo está por descubrir.

De todas las obras que hallamos en este libro, la más inquietante es la de Alzate, la más intensa y cargada de narrativa es la de Valenzuela, y la más sugestiva es la de Rubín.

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 La inquietante propuesta de Alzate
Alzate descuella por su grafismo oleico y fantasmal, que congrega seres etéreos en espacios de atmósfera sobrecargada. Su planteamiento de los espacios de la Alhóndiga atemoriza un poco, pues nos habla de espíritus que allí habitaron y que hoy se aferran aún a las piedras de la vieja fachada. Todo lo contrario hace Valenzuela, que formula una historia con mucho relato, abigarrada incluso, en la que vuelca su "verborrea gráfica" combinada con su pasión por la alegoría, como un ejercicio de combinatoria narrativa (aquélla de los Sterne, Borges, Calvino o Queneau), pero aplicado al cómic. Valenzuela es el único autor que se aleja de Alhóndiga para lanzar una mirada perspicaz sobre la necesidad de los ciudadanos de rehabilitar sus edificios al mismo tiempo que homenajea a Bilbao, esa ciudad "fea" (como nos recuerda De Isusi) que está representada en la flotante Balboa, sobre cuyo techo protector atisbamos en una viñeta el edificio de Alhóndiga.

Mucho más sencilla es la historieta de Rubín, que sí se desarrolla en el espacio arquitectónico de Alhóndiga y con un argumento mucho más lineal: ciertos individuos, sujetos de un experimento, van llegando al nuevo espacio y en él sufren sensaciones de vacío y estrés, pero según van comprobando que serán más los que lleguen van ganando confianza en un futuro cargado de esperanzas. Rubín trabaja esta simple historia sobre fondos blancos, límbicos, sin nada, para mostrar así que todo lo que hay fuera de Alhóndiga Bilbao está por construir, está por venir.

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Página del sugestivo trabajo de David Rubín  
Con esta simple representación, posible de plasmar gráficamente con la historieta antes que con otros medios, el autor logra promover la curiosidad por un futuro prometedor y suscitar nuestro interés por todo lo que en ese edificio podrá hacerse. Sobre todo por el cómic, que algo se está cociendo.

Hay un detalle que nos ha llamado la atención del libro: Rubín es el autor más joven que participa en él, organizándose los más veteranos por orden preferente en el orden de lectura. Rubín no se queda para el final. Rubín se sitúa en la cabeza, entre las tres obras primeras. El coordinador del libro nos ha aclarado que la obra colocada al final del libro, la de De Isusi, encajaba mejor con la idea de familiarizar al lector con el conocimiento del edificio y sus objetivos. Lo cierto es que la historieta de Rubín se ajusta mejor a los planteamientos del arranque del libro, amén de que es un autor que merece la máxima consideración, por su versatilidad y la inteligencia de sus propuestas, puesto que se ha movido entre distintos géneros y por distintos medios, siempre con brillantez, y posiblemente se trate de uno de los autores más adelantados de la historieta contemporánea española.

Gracias a la combinación de lo más granado de nuestra historieta y de lo más joven, El secreto de Alhóndiga Bilbao se convierte en un libro de historietas encantadas y encantadoras. Ojalá en ese espacio se desarrollen promesas tan interesantes como las historietas que aquí se recogen.

El secreto del porvenir de la historieta
Creación de la ficha (2010): Manuel Barrero, con edición de Félix López.
CITA DE ESTE DOCUMENTO / CITATION:
Manuel Barrero (2010): "El secreto del porvenir de la historieta". Disponible en línea el 21/XI/2024 en: https://www.tebeosfera.com/documentos/el_secreto_del_porvenir_de_la_historieta.html