Libro de 164 páginas en blanco y negro más cubiertas en color, encuadernado en rústica.
Texto promocional:
José Guadalupe Posada es el gran ilustrador de lo mexicano. Sus dibujos mientras vivió, no tuvieron espacio en ningún museo, aunque nunca fue su objetivo; tuvieron un fin mejor: volar por los aires mexicanos, mirarse en las calles, las iglesias, las mesas para el juego, en cartas de amor, cancioneros, periódicos, anuncios... En cada casa, modesta o lujosa, había uno de sus trabajos. Su obra fue realizada para el momento, para lo efímero y sin embargo, trascendió de tal manera que hoy está más viva que nunca. Impresa en blanco y negro o en tonos multicolores, que ilustraron todo lo que los ojos podían mirar. La obra de Posada pertenece a un artista que nunca antes se pensó como tal. Sus calaveras forman parte de la iconografía nacional, su Catrina es la obra mexicana más conocida en el mundo, pero Posada es más que las calaveras, su temática es vasta. Su impacto estético fue tal, que la plástica contemporánea no se entiende sin sus líneas, que sin duda trazaron el arte mexicano.