Hijo de padres evangélicos, se formó como religioso y desde 1923 fue profesor de ciencias y lengua española en un seminario de Barcelona, a la vez que alumno de teología. Por entonces también trabajó como redactor de la revisa El Eco de la Verdad, de la que posteriormente fue director.
En 1924 fundó la Iglesia Evangélica de Tarrasa y, en 1933, la de Manresa. En 1938, huyó del país hacia Francia, organizando allí un servicio de asistencia a los exiliados republicanos, fundando para ello una revista denominada El Refugiado. De allí pasó al Reino Unido, donde participó en un comité de socorro para los hambrientos españoles. En 1939, regresó a España para tomar de nuevo el pastorado de la Iglesia de Tarrasa, organizando cultos en domicilios particulares y ayudando a otras iglesias clausuradas por el régimen de Franco, editando un "Sermón por Correo". Durante cinco años ejerció el cargo de Presidente de la Unión Evangénlica Bautista por sucesión, lo cual fue oficial a partir de 1946 y hasta 1949, cuando dimitió debido a las presiones que recibía por causa de su lucha constante en defensa de la libertad religiosa, que le ocasionó no pocos problemas. Desde los años cincuenta, se dedicó a fundar iglesas evangélicas por toda España, desde Puigcerdá hasta Ceuta.
Escribió y publicó desde 1924, casi medio centenar de libros, y tradujo casi dos centenares de obras ajenas. Acabada la Guerra Civil, puso en marcha el Departamento de Publicaciones de la Misión Cristiana Española, desde el cual editó libros evangélicos en la clandestinidad. Posteriormente, lo transformó en Editorial CLIE (Comite de Literatura para las Iglesias Evangélicas), instalando en su casa su propia imprenta en 1964 y pasando a ser la mayor editorial evangélica del mundo de habla hispana.
Fue investido doctor honoris causa en 1970 y nombrado Académico de la Lengua Española por la Academia Norteamericana en 1991.