Reinoso cursó Peritaje Mercantil en la Escuela de Comercio de Valencia y desde los quince años trabajó en un banco. Después del servicio militar, por medio de un sobrino de Cabedo Torrens que dibujaba en la prensa valenciana, y por el cual Reinoso sentía gran admiración, entra en contacto con Editorial Valenciana, donde coincide con lo más representativo de la escuela valenciana como Karpa, Palop, Liceras, Nin, Serafín y Rojas de la Cámara, entre otros. Autodidacta, su primera serie fue Chapulín y Potrolindo (al principio, Cocoliso y Tragavientos), publicada en los años 1959 y 1960 en la revista Jaimito. Después, por razones laborales, abandonó el mundo del cómic durante 24 años.
En 1984, de la mano de Rojas, vuelve a colaborar con Valenciana en las revistas Pumby (Inspector Lapide), Toby (El tío Sento) y, nuevamente, Jaimito, cuando la editorial ya anunciaba su final. En marzo de 1985 comenzó a publicar en el número 6 de la revista valenciana Camacuc su serie más longeva, que ha continuado hasta la actualidad: Pasqualet, rei de la brota. Esta serie es la primera publicada en álbum por la editorial Camacuc.
Posteriormente realizaría una adaptación de las Mil y una noches, también recogida en álbum y en 1987, y paralelamente a Pasqualet, publica El bosque del calor. A principios de los años 1990 publica Guiño y Tap, una serie de detectives para la misma publicación.
En 2016, Rafael Reinoso dibujó la historia de la banda catarrojina cómico-taurina-musical El Empastre, plasmándola en una auca. En 2017, la falla de L'Albufera de Catarroja obtuvo el máximo galardón que entrega la entidad cultural Lo Rat Penat al mejor llibret «en llengua valenciana». L'Albufera se llevó el premio «Regne de Valéncia al millor llibret en el seu conjunt», una obra dedicada a la historia del cómic valenciano y, en particular, al historietista Rafael Reinoso; el cual también ha sido reconocido el mismo año con el premio Josep Chulvi, de la asociación Joan Baptista Basset de Catarroja, por su defensa y promoción del valenciano.
En la segunda década del siglo XXI ha seguido colaborando en la revista Camacuc.