Autor autodidacta, muy influido por Robert Crumb, Pontiac destacó en la escena punk y del fanzine neerlandés en los años ochenta, caracterizado por reflejar en sus historietas sus experiencias vitales, en las que la heroína estaba muy presente. Sobre todo se le conoce por su labor como ilustrador, muy afin a los grupos musicales que nacieron en su época, a los cuales retrató con gran verosimilitud. Fue un gran cartelista y realizó muchas portadas de discos.
Su obra ilustrada y de historieta fue publicada en muy variadas revistas, como Aloha, Muziek Express, Tante Leny, Modern Paper, Gummi, Anarchy cómics, OOR, NRC Handelsblad o la española El Víbora. También dibujó en un diario, el Algemeen Dagblad, entre 1995 y 2001, concretamente una serie con una viñeta alusiva a la previsión meteorológica.
Gran parte de sus libros (ilustrados y de cómic) fueron publicados bajo el sello Oog & Blik, la editorial fundada por Joost Swarte y Hansje Joustra en 1985. De sus títulos más destacados podríamos entresacar: Requiem Fortissimo (1990), De ketens van kitsch (1998), Kraut Biografiek (2000) o Styx - of: De Zesplankenkoorts (2015). En los años noventa fue recogida casi toda su obra gráfica bajo la cabecera Pontiac Review, reeditándose casi toda su obra en siete tomos.
Obtuvo varios reconocimientos a lo largo de su vida: Premio Stripschapprijs por toda su obra en 1997, el Professor Pi-illustratorenprijs en 1998 (por su labor como ilustrador) y el Marten Toonderprijs por toda su obra en 2011.