Pintor e ilustrador valenciano y valencianista, ligado a la cultura popular y a la prensa sicalíptica anticlerical de los años treinta.
Hijo de un médico católico y una profesora, Pertegás fue alumno brillante de la Academia de Bellas Artes de San Carlos, pintor avanzado y miembro de la asociación valencianista València Nova, siendo un miembro activo durante los años veinte. Fue ilustrador de prensa y escenógrafo vinculado a esos movimientos, y firmó portadas para Semanai Valencianiste, Periódich Regionaliste, y en libros de autores de su cuerda, como Mariano Ferrandis o Llorente Falcó. Gran parte de su producción la destinó a la prensa que editaba Vicente Miguel Carceller, republicanista a ultranza que triunfó con sus periódicos El Clarín y La Traca. Pertegás publicó en ambos periódicos ilustraciones y viñetas, en el primero sobre asuntos taurinos, con su nombre, y en el segundo viñetas de humor grueso, de carácter sicalíptico sobre todo, y siempre utilizando seudónimos. Allí usó Tramús, y luego utilizó otros sobrenombres, como Sade y se cree también que Fersal, en revistas del mismo editor como La Chala, El Piropo, Bésame, Rojo y Verde, y otras.
También fue un gran representante de la feminidad ilustrada, más o menos erótica, como lo ejemplifican sus portadas e ilustraciones para la serie de novelas El cuento de Dumenche (1914), para la novela de Blasco Ibáñez Mare Nostrum, en la revista El Fallero, o mismamente en sus pinturas, que dieron mucho que hablar en su momento debido a su atrevimiento y frescura, ya que era defensor de la liberación femenina de los impuestos del hogar.
Tras la Guerra Civil se salvó de la depuración debido a sus amistades entre la milicia franquista, pero su obra pictórica de desnudos desaparecieron en los primeros años de posguerra, así como gran parte de las publicaciones de Carceller en las que había dibujado. Pertegás volvió a dibujar para la prensa popular, pero ahora haciendo tebeos para Guerri (Ultus) o para Valenciana (Silac, sobre guión de su hijo P. Senis) y otros de carácter infantil, firmando en este caso como Henry. Murió en el olvido.