Desde muy joven, con solo 18 años, comenzó a hacer historietas para Nómina Editora e ilustrando portadas para la revista Bala de Plata. Tras dibujar algunas historietas bajo la guía de Jorge Morhain, sería reconocido por la afición cuando pasó a trabajar para la Editorial Yago, en cabeceras muy populares entonces como Rayo Rojo, Misterix y Cinemisterio, siendo él quien tomó el relevo en el dibujo de la célebre serie Misterix en 1965.
En el ecuador de los años sesenta inició una colaboració con el sello Columba que sería muy longeva. En D’Artagnan dibujó El Comisario por entonces, y en los setenta otras series muy seguidas por la afición, como Sam Malone y Victor Vanel. En 1966, colaboró en la revista Ofensiva al mismo tiempo que trabajaba trabaja sellos extranjeros por agencia, como Charlton.
Sin dejar de colaborar con Columba, trabajó para el sello Record, para la cual hizo Chinatown, serie publicada luego en la italiana Lanciostory, y Caza al tesoro, ofrecida por entregas en Tit-Bits. En el final de los años setenta dibujó para D'Artagnan series como A Quemarropa y Cimarrón, escritas por Ray Collins. Fue también uno de los dibujantes de la versión argentina de Superman, editada por José Alegre.
En la década de los ochenta dibujó para Intervalo la serie Gente de blanco y en esa misma revista y en otras de Columba dibujó abundantes historietas cortas o adaptaciones de películas, como Scarface, o novelas, como Contragolpe. En 1986, dibujó en la tercera época de la revista Rico Tipo y luego trabajó para el sello Eura, en el que se quedó nueve años, con series como Detective Junior, Como perro y gato y La Sagrada Familia.
Durante los noventa prosigue su vínculo con Columba, con trabajos en Nippur Mágnum, y en el final del siglo, en 1999, comenzó a trabajar con la editorial italiana Sergio Bonelli integrándose en el equipo responsable de Julia, el personaje creado por Giancarlo Berardi.