Édith comenzó colaborando en varios cómics en los ochenta, destacando sobre ellos Ornicar (Futuropolis), pero ella despegaría realmente en los noventa, a partir de la obra Basil et Victoria, sobre guion de Yann, que le reportó un premio Alph'art en 1993 y fue adaptada a los dibujos animados. Siguió trabajando en libros para chavales y abordó obras con otro calado, como la de reivindicación feminista Quatre punaises au club (con Nathalie Roques, Dodo y Florence Cestac).
Sus primeras series de mayor envegadura arrancaron en los 2000: Eugène de Tourcoing-Startrec, Le Trio Bonaventure o Les Hauts de Hurlevent. Otra serie importante fue la desarrollada con el guionista Éric Gratien a partir de 2014, Anita Bomba, demostrando ser una buena artista para la aventura. Entre sus obras más recientes se cuentan: Le Jardin de minuit, Emma G. Wildford (que sería traducida a varios idiomas), Mimosa, Séraphine o Moi, Edin Björnsson.