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ACCORSI, Andrés (1994): “Reportajes. Hoy: Carlos Meglia”, en Comiqueando, # 6, Comiqueando Press, Buenos Aires (X-1994)


[ Imagen: Portada de la edición española de Cybersix, de Meglia ]

Cybersix, núm. 2, editado por Planeta-DeAgostini

«REPORTAJES Hoy: CARLOS MEGLIA
por Andrés Accorsi
DESPUES DE UNA LARGA TRAYECTORIA EN LA HISTORIETA, LA ILUSTRACION Y EL DIBUJO ANIMADO, CARLOS MEGLIA SE QUEDO CON SU PRIMER AMOR. HOY VIVE JUNTO A CARLOS TRILLO EL EXITO INTERNACIONAL DE CYBERSIX Y EL RELANZAMIENTO DE IRISH COFFEE, OTRA DE SUS CREACIONES JUNTO AL GRAN GUIONISTA ARGENTINO. CON USTEDES, UNO DE LOS MEJORES DIBUJANTES QUE TIENE ESTE PAIS.
AA: Empezá presentándote. Contanos cuándo y dónde naciste, cómo te metiste en esto...
CM: Yo nací en Quilmes, en el año '57. Y ya a los 9 años entré en Bellas Artes. Mi vieja me vio condiciones. ¿Viste los viejos que dicen "Mi nene va a dibujar"? Y dijeron "Bueno, ya que a este chico le gusta dibujar, vamos a apoyarlo". Y me metieron en Dibujo Infantil, en Bellas Artes. Y ahí cursé hasta los 12, después hice preparatoria de Dibujo, siempre en Bellas Artes. Hice un curso de ilustración publicitaria, el Magisterio de Dibujo, de todo... salí de Bellas Artes a los 25 años y volví a los 28, a enseñar.
A los 17 años tuve una materia que era Historieta, que la daba Oswal. Y Oswal me llamó y me fui a trabajar con él, haciendo los fondos de Sansón y Meñique, para García Ferré. Después me puse a hacer fondos para sus historietas. El había tenido un lapso de unos seis años en los que no hizo historietas. Cuando retomó, dio la casualidad de que yo estaba al lado de él y me vino bárbaro. Me acuerdo que lo último que hice con él fueron los fondos de la Tercera Parte de El Eternauta. Además Oswal sabe un pedazo. No sabés lo que sabe ese tipo. Y se aprende mucho con él. Y ahí empezó mi carrera.
Después, a los 18 o 19 años, empecé a caminar. Me acuerdo que lo fui a ver a Cascioli y le vendí la ilustración para la promoción de El Péndulo y después hice las ilustraciones de los índices. Y mientras tanto, seguía colaborando con Oswal. Fui a Anteojito, donde nunca me compraron nada. Y después estuve en Record. Empecé haciendo La Biblia para los Niños con Horacio Domingues y algunas historietas. Pero era todo muy raro, muy extraño. Yo, por ejemplo, hacía historietas sin ganas. Lo hacía como un trabajo. Era la onda de no cortar la cadena. Ya me había metido y tenía que seguir. Pero no me gustaban ni los guiones... no me gustaba nada. Aparte te daban los guiones de tipos conocidos, pero yo no tenía oportunidad de charlar con los guionistas. Entonces hacía lo que se me cantaba. A mí me daban una historieta del Oeste y yo la llevaba al futuro, le metía cosas de Ciencia Ficción, hacía pinturas tipo al óleo en cartones... y después venian los guionistas y decían "Esto es lo que yo me había imaginado!" (risas) Claro! Y en el guión decía "Western". Y además en Record hice el Martín Fierro, el Quijote, un montón de cosas. Para esa época también había empezado a trabajar en Satiricón, en El Gráfico y en Billiken. Laburaba para cuatro revistas a la vez. Estuve así durante tres años, tres años y medio. Hacía ilustraciones, historietas, tapas, todo... y llegó un momento en que no aguante más. Se me pudrió el cerebro. ¿Viste cuando ya no podes hacer más nada? Necesitaba una especie de instituto para recuperarme. Y justo me llamó Jaime Díaz, que necesitaba un fondista para un largometraje de dibujo animado. Y bueno, fui y me gustó mucho, me gustó la onda que había, porque era la época en que Jaime Díaz era bueno. Recién había venido de EEUU y estaba todo bárbaro. Avisé en todas las editoriales que por un tiempo no quería saber un carajo y estuve cuatro años ahí, con Jaime, haciendo fondos, haciendo lay-outs, haciendo intermedios... todo eso.
AA: ¿Qué dibujos animados de los que se hicieron acá tuvieron tu toque?
CM: Mirá, yo pintaba los fondos de Los Pitufos. Después hice los lay-outs de unos capítulos que están dando ahora en el Cartoon Network de Galtar y la Lanza Dorada. Esa serie era la competencia de He-Man, en aquella época y estuve casi un año haciendo los lay-outs. Allá, en EEEUU, era una serie bastante importante. Después hice Scooby-Doo, Los Picapiedras, los Snorks, los Supersónicos, los Superamigos... y bueno. Llegó el día en que yo estaba re-podrido del laburo. Claro, porque yo ya había hecho fondos, había hecho lay-outs, había hecho intermedios, la animación no me gustaba porque es un embole hacer animación, entonces le digo a Jaime "Me voy". Y me dice "¿Por qué? Si acá hay trabajo...".Y yo le digo "Yo acá aprendí a hacer de todo. Ya no me queda nada más por hacer. Me queda una sóla cosa, que es ser dueño del estudio, pero el dueño sos vos. Entonces me voy". Ya otra cosa no podía hacer. Entonces me fui y no tenía ningún tipo de laburo. No tenía nada.
Estamos hablando del año '86...y me quedé sin nada. Y me llamó Horacio Domingues, porque nos andabn buscando para encargarnos otra Biblia. Y empecé a hacer de vuelta La Biblia, que fue un laburo que duró casi un año y medio. Para ese entonces volví un tiempo a Billiken, pero como habían muchos kilombos internos agarré y me fui a la mierda. Y un día me entero de que Trillo está mandando material a Italia. Lo llamo por teléfono y me dice "¿Pero vos no estás trabajando con Alfredo (Scutti)?". Yo le digo "No, con Alfredo hace tiempo que no trabajo". La onda entre ellos era "No toques a este, yo no toco a aquel", una cuestión de no armar kilombo. Entonces lo voy a ver y me prepara un guión de ocho páginas, que terminó siendo el primer capítulo de Irish Coffee. Y yo estaba acostumbrado a trabajar para Alfrddo, que me decía "¿Por qué no lo hacés un poco más así?"...Me rompía las pelotas, me volvía loco (risas). Yo quería hacer otro tipo de cosas. Entonces Trillo me dice "Y, hacelo como quieras". Y ahí es como que me cagó. Porque al decirme "hacé lo que quieras"...yo tenía un montón de cosas en la cabeza. Hay que ver qué es lo que yo quería. Y estuve como dos meses dando vueltas, dando vueltas, mientras hacía tapas para Cordones Sueltos en Kapelusz y los fondos de otro dibujo animado, de una agencia de publicidad. Y al cuarto mes le lleve la historieta a Trillo. Y era rara, no se parecía a lo que él estaba haciendo. Y Carlos me dice "A mí me encanta". Y se la mandó a los tanos. Los tanos dijeron que sí, y desde entonces laburo con Trillo.
AA: ¿Qué historietas te cebaron de chico como para querer dedicarte a esto?
Foto de Carlos Meglia, copyright 2000 Dimensión CeroCM: Yo leía historietas desde muy chico. Era de esos grandes consumidores de historietas que tenía pilones...pilas y pilas de historietas. El primer tipo que me dijo que yo iba a hacer historietas fue Oswal. Porque yo llevaba los pilones de historietas y él me decía "Vos vas a dibujar historietas porque estás juntando. A vos te gusta la historieta". Y a mí en esa época me gustaba la ilustración. Ahora, lo que me motiva para dibujar historietas son los guiones. Yo no tenía suerte con los guionistas. Como te decía, cuando Alfredo me tiraba los guiones, para mí era un laburo más. ¿Viste cuando no te metés de lleno?. Pero cuando Carlos empezó a escribir especialmente para mí, la cosa cambió. Con Carlos pasa una cosa muy rara. Algunos dicen que Carlos y yo somos el equipo que mejor se lleva. Nosotros nos sentamos y las ideas salen solas. ¿Viste cuando coincide todo, todo, todo? Claro, porque tenemos las mismas inquietudes. En general, en nuestras historietas hay muchas cosas de cuando éramos chicos, tanto de Carlos como mías. Pero lo que más me motivó hacia la historieta fueron los guiones de Carlos.
AA: Nosotros sabemos que estás haciendo todos los meses unas 100 páginas de Cybersix...
CM: Más. Llegamos a hacer 250 páginas por mes de Cybersix.
AA: ¿Cómo da para tanto ese personaje? Si a vos te dicen "Se trata de una vampiro-androide-superhéroe-transexual", vos decís "Esto es una payasada". Es como decir "Tortuga Ninja Adolescente y Mutante". ¿Cómo se pasa de un concepto tan bizarro a un producto tan exitoso, de tanta calidad y de tanta pasión por parte de ustedes?
CM: Porque el concepto, si bien se puede definir así, en cuatro palabras, es muy abierto. En Cybersix puede pasar cualquier cosa. Es la fantasía potenciada. Pueden parecer ángeles, demonios, fantasmas, muertos que resucitan, cualquier cosa. No hay límites, entendés? Desde el vamos, partimos de ideas básicas. La historia de Cyber, desde un principio, es como una historia bíblica. La matanza de los inocentes, uno que logra escapar y así. Y después, Carlos juega mucho con la telenovela. Cybersix es una historia de amor. Si te fijás, son todos desencuentros. Ella está enamorada de un tipo y el tipo está enamorado de ella, pero ella se tiene que disfrazar de tipo...es un kilombo constante. Y es todo muy abierto. Si partimos de la base de que es un ser cibernético creado, si el profesor que la creó se puede sacar el cerebro y meterlo en otro cuerpo, ahí ya tenés una pauta de las cosas que se pueden hacer. Se puede hacer cualquier cosa, se puede escribir cualquier tipo de historia con Cybersix. Podés hacer lo que se te cante. Eso es lo bueno. Además, en el primer año y medio, no sé cuántos personajes han aparecido, pero deben ser más de 200 personajes secundarios y todos son muy sólidos. Entonces vos tomás a cualquiera de esos personajes y sale una historia. Son todos bárbaros. Hay escritores, drogadictos, pendejos, cualquier cosa...
AA: Para hacer tantas páginas, obviamente se requiere el esfuerzo de un equipo. ¿Cómo te las arreglás con la gente que trabaja con vos?
CM: Mirá, en este momento debo tener unas 8 personas. El trabajo es muy simple. Yo estoy haciendo el mismo trabajo que se hace en dibujo animado. A cada persona se le da la plantilla de modelos, con Cyber de frente, de costado, de arriba, de abajo, de todos lados, para que no hayan problemas y lo mismo de todos los personajes. Se hace el lay-out. El tipo tiene que dibujar y pasar a tinta. Después se chequea, se corrigen cosas. Si aparecen nuevos personajes secundarios, se dibujan aparte. Generalmente yo diseño los personajes, salvo cuando son personajes muy boludos que aparecen una sóla vez. Los fondos parten de dos fondistas del estudio, que armaron los fondos de toda la ciudad. Hicimos grandes carpetas, que se les reparten a todos. Y tratamos de usar siempre los mismos fondos porque además, los guiones de Carlos lo permiten, porque tocan siempre los mismos lugares. Transcurre todo en una ciudad que ya tenemos dibujada. Del departamento de Cyber, por ejemplo, tenemos seis puntos de referencia vistos del exterior y cuatro o cinco del interior. Usamos mucho material de stock. En un principio a los dibujantes mucho no les gustaba, porque decían que era un ladrón, que esto, que lo otro. Pero lo mismo se hace en el dibujo animado. Y son cosas que los italianos no entienden. Cada vez que voy allá, me preguntan cómo hago, porque ellos todavia están acostumbrados a dibujar todo. No lo entienden.
AA: ¿Para cuánto le ves a Cybersix? A nivel éxito, parece que da para mucho. A nivel creación y onda tuya y de Carlos, ¿cómo la ves? Es algo fuerte, porque ya lleva varios años...
CM: Si. Se está publicando el libro 10 y nosotros estamos terminando el libro 26. Las críticas son fabulosas. Yo creo que va a dar para largo. Es una especie de Dylan Dog. A la gente le gusta. Además, al tener todo armadito, tanto Carlos como yo ya podemos darnos el lujo de pensar en otras cosas y de ponernos a trabajar en otras cosas.
AA: ¿Es cierto que vuelve Irish Coffee?
CM: Si, estamos haciendo capítulos semanales de 12 páginas pero sin el equipo que trabaja en Cyber. Lo hago yo solo con un fondista.
AA: ¿Y te alcanza el tiempo para coordinar el laburo de Cybersix y además hacer todo Irish Coffee?
CM: Si, porque lo de Cyber camina solo. Ya van tres años. Aparte tengo un tipo que es Alejandro Santana, que es bárbaro. Es como una prolongación de mi cerebro. Laburamos tres años juntos y es un tipo piola, así que aprendió todo. Está todo bastante aceitado. Costó un huevo llegar a esto. Yo laburé solo dos años y se me pudrió el bocho. Y ahora estoy con todas las pilas puestas en Irish, porque lo otro camina solo.
AA: No tanto ahora, pero hace unos años había una especie de prejuicio anti-Meglia por el tema de que tu dibujo es muy...muy Disney. Que no era historieta adulta, sino un dibujito animado disfrazado de historieta. ¿Vos qué les contestarías?
CM: Y, que hago lo que puedo. Yo trabajo con lo que conozco. En mis historietas hay pocos negros porque yo no sé poner negros. Yo manejo una fórmula, un lenguaje que es bastante simple. Pero sí, me han criticado un montón y me han dado una cantidad de palos que no te imaginás. Pero después me dijeron por qué me daban palos.
AA: ¿Por qué?
CM: Porque estaba caminando. Si yo hubiera hecho eso y no hubiera pasado un carajo, nadie habría dicho nada. "'Ta bien, es un pibe que dibuja, dejalo tranquilo". Pero cuando ese pibe que dibuja está haciendo algo y va caminando despacito, "No, pará. Con ese dibujo choto no puede ir a ningún lado". Eso pasa. Pero bueno, ¿qué sé yo?
AA: ¿En qué otros países se está publicando tu material?
CM: Ahora se empieza a publicar Cybersix en Francia. Se lo vendimos a la editorial Ben Deus, que saca en Noviembre el primer libro de 200 páginas, uniendo dos libros de los tanos. Lo sacan en tapa dura cada dos meses. Y publicar en Francia es una ventana. Aparte es un orgullo, porque en Francia la única historieta masiva italiana que se ha publicado es Dylan Dog y ahora le seguimos nosotros. Algo pasa.
AA: ¿Cómo ves la posibilidad de publicar en EEUU?
CM: Yo lo estuve pensando mucho. Y uno puede llegar a trabajar para los americanos, trabajar bien, cobrar bien...pero haciendo lo que ellos quieren. Si yo voy con Cybersix, no sé si me dan pelota.
AA: ¿Puede ser que hayas tenido una oferta de DC para dibujar Batman?
CM: Si, pero no pasó nada. No pasó nada porque yo tenía que hacer Cybersix. Iban a ser tres libros prestige, pero yo lo pensé bien y...no sé. Pensé muchas veces qué podría llegar a pasar si uno tocara el mercado americano. Y lo más probable es que me den para dibujar Batman o Superman, no las cosas que a mí me gustan.
AA: ¿Hay dando vueltas por ahí, fuera de la historieta, algún otro proyecto con tus personajes?
CM: Si. El Estudio Mazza, los que hacen todos los video-clips para la Sony Music, que hicieron ahora un par para Baglietto y Diego Torres, son unos pibes que andan muy bien. Y nos mandaron llamar, porque hacía un año que estaban buscando material para hacer en video, para televisión y no encontraban una idea buena. Contrataron guionistas de la tele, pero no les convencía. Y una amiga les llevó todas las cosas de Cyber, me llamaron y dijeron que lo quieren hacer. Estos tipos trabajan con Gasalla, hacen la presentación y todo eso. Y parece que Gasalla los apoya y dijeron que sí, y ya están laburando. Van a hacer un casting y dicen que antes de fin de año tienen que tener un capítulo de una hora filmado y para Marzo o Abril tienen que tener seis o siete más. Y parece que las posibilidades son muchas. Están muy copados.
AA: ¿Es cierto que laburaste en el nuevo dibujo animado de Batman?
CM: Si, hice lay-outs. El trabajo de lay-outs y de animación se hacía en Canadá. De Canadá lo mandaban a Argentina. Y habré hecho unos 12 capítulos... uno de un parque de diversiones con el Guasón, uno de Batman en un volcán...no me acuerdo mucho, porque me daban algunas escenas, algunos tramos de las películas.
AA: ¿Los viste después?
CM: Si. Me gustó mucho, están muy bien dirigidos. Y rompían bastante las pelotas con los lay-outs, los cuidaban muchísimo. Esto fue justo cuando empecé con Cyber y lo tuve que dejar para hacer eso. Pero la serie me encanta. Me parece una de las mejores series de animación que se han hecho. Tiene un clima genial.
AA: Para ir terminando, ¿cómo ves la industria del comic en Argentina?
CM: Es un caos. Un caos. Yo creo que acá se tiene que revertir la cosa como está pasando en Italia. La historieta se fue haciendo muy popular, pero tan popular que se fue haciendo en papel muy berreta, todo muy berreta para que esté al alcance del público. Si un tipo tiene cinco pesos, se puede comprar una revista o un kilo de carne ¿y qué va a comprar? Hasta que no salgamos de este problema económico que estamos pasando y que yo considero que es un problema grosso, aunque todos digan que estamos re-bien, esto no se va a revertir. Mirá a Columba. Columba está haciendo lo posible para volver a vender poco. No están vendiendo nada. Están desesperados. Eso no puede ser, es terrible. Es un momento malo. Y encima llegan de España, por dos mangos, revistas con unas tapas impresionantes, 120 páginas, papel ilustración y qué sé yo...por dos mangos. No se puede competir con eso. Ese es el problema.
AA: Y de lo que viene de afuera, ¿qué te gusta? ¿El material europeo, los superhéroes, el manga?
CM: No, al manga no me lo banco. El manga me parece una tomada de pelo. En serio, es una tomada de pelo. Yo no lo puedo creer. Cuando estuvimos en el Salón de Barcelona... vos no sabés cómo consumen manga los gallegos! Se compran todo! Y me puse a hablar con un japonés y le digo "¿Por qué dibujan todos igual?". Y el japonés me dice "Pero es historieta". "Si, ¿y?". "¿Y qué clase de dibujo le quiere poner a una historieta? Es ese". Como que si vos hacés historieta, tenés que hacer ese dibujo, no podés hacer otra cosa. Yo no entiendo. En Europa están haciendo estragos. Arrasó con todo, el manga. Y lo bueno es contado con los dedos. Hay mucha, mucha basura. Yo no creo que acá tenga la misma aceptación... bah, no sé...no sé cuál es la onda.»


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Ficha de Meglia

Breve Biografía de Carlos Meglia

Reportaje a Carlos Meglia, de Quintadimension.com


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