José Julio Gómez Sanz es dibujante, caricaturista y humorista gráfico.
Bastantes conocemos sus trabajos firmados con su nombre, José Julio, por
haber aparecido esporádicamente en multitud de medios, como en algunos
libros editados por La Golondriz / Academia de Humor, en algunos
portales de humor españoles (Humoràlia –www.humoralia.org-, o Portal El
Can –www.portalelcan.com-). Muchos de nosotros le conocemos realmente
por su trabajo conjunto con Alberto Blesa, guionista con quien elabora
los chistes gráficos que, distribuidos por Europa Press, aparecen en
varios diarios españoles. Nos referimos a PareJA, firma que viene
apareciendo en multitud de diarios por toda España.
José Julio cursó estudios de Dibujo Artístico y Pintura al óleo en la
academia de Artes y Oficios de Madrid, en lo cual invirtió ocho años.
Publicó sus primeros dibujos precozmente, a la edad de 13 años,
dirigiéndolos a Ediciones Recreativas S.A. Al año siguiente ya publicaba
un primer texto humorístico en las páginas del cáustico Hermano Lobo
que dirigía Chumy Chúmez.
También sintió la llamada de la historieta, y comenzó a publicar sus
primeros cómics con guión y dibujo propios a partir de los 14 años, en
lo que estuvo probando suerte hasta que cumplió diez y ocho. Alcanzada
esa edad, creyó juicioso probar suerte en la animación y pasó el
siguiente par de años de su vida trabajando como dibujante creativo, en
la serie de dibujos animados Don Quijote de la
Mancha, de producción española y que se ha
emitido en multitud de países.
A
partir de ahí su firma se volvió camaleónica. Tan pronto desarrollaba
diseños para agencias de publicidad como ilustraba cuentos infantiles o
libros de texto. Hasta un punto en el que decide que lo que más le
apetece hacer en lo sucesivo es humor en prensa. Comenzando por
caricaturas y tiras semanales que iba destinando al diario Pueblo
para luego pasar a elaborar chistes y caricaturas destinadas a la
publicación El Cocodrilo. También colaboró en publicaciones tan
diversas como El caso, Época, Disco Show, Basket 16, Dinero, Coche
Actual y otras, como Ya, donde apareció la tira en color
La Semana Política durante mucho tiempo.
Como dibujante ha cosechado variados premios: Ganó el concurso para
crear la mascota de la Federación Madrileña de Judo, momento desde el
cual colaboraría activamente para dicha entidad. Gano el 1º Premio en el
concurso internacional de caricatura que organiza la República de China,
siendo invitado a dicho país a recoger el premio de manos del conocido
caricaturista americano "LURIE". También fue invitado por el centro
Washington Irvin de los EE UU en Madrid para participar en diálogos de
traducción simultánea entre dibujantes y humoristas gráficos americanos
y españoles.
Ha
salpicado su trabajo entre prensa, en entidades como Luike-Motorpress
S.A., Ediciones Blancas y otras, y agencias de publicidad, como Pfizer,
Publimed, Draft, Conorg... Actualmente, viene compaginando la creación
personal con otros trabajos en colaboración con el guionista Alberto Blesa, para OTR (Europa Press), la revista Perfiles y otras
publicaciones.
Entre los premios que ha obtenido se cuentan: Premio "Orden de la Legión
de Humor" otorgado por la "Academia de Humor LA GOLONDRIZ". Y desde
entonces colabora para sus publicaciones. Recientemente, ganó el
concurso para crear el Logotipo de la Asociación Madrileña de Profesores
de Judo (él es cinturón negro).
Entrevista:
P.
Has sido un dibujante todo terreno, y desde hace muchos años. ¿Qué
trabajo exactamente desarrollaste en Ed. Recreativas?
R.
Todo lo relacionado con la historieta. Desde maquetación de una página,
inserción de textos y “bocadillos”, titulación, color mediante
cuatricromía, portadas, y demás labores sobre obras ya dibujadas, hasta
crear mis propias historietas con guión y dibujos. Mi editorial tenía
los derechos sobre Disney, Hanna-Barbera, Heidi y Vikie el vikingo,
personaje sobre el que básicamente realicé mis historietas.
P.
Dinos dónde aparecieron tus primeros cómics, aunque viesen la luz sin
firmar. ¿Y por qué dejaste de dibujarlos?
R.
Tras la experiencia mencionada, colaboré con Chiqui de la Fuente,
pasándole originales a plumilla y tinta. Clásicos como Los tres
mosqueteros, para Larousse. Donde realmente aparecieron mis primeras
historietas originales con personaje propio, fue en el diario Pueblo,
con “Bartolo el pasota”, que aparecían semanalmente en las páginas
musicales. Si mi trabajo en la historieta no continuó fue porque a
partir de entonces lo alternaba con caricaturas y chistes para prensa,
camino por el que finalmente me terminé decantando.
P.
Tu paso por Pueblo fue fugaz, imagino. ¿Recuerdas la implicación
de su director con el humor? Lo pregunto porque Pueblo se
caracterizó por mimar a los humoristas gráficos en la España de la
posguerra...
R.
Lamentablemente, si mi colaboración en el diario Pueblo no llegó al año,
fue porque asistí a su última etapa, hasta el momento en el que el
Gobierno decidió su cierre. En esa recta final era el genio de José
Asensi el que tomó la batuta del director en ese terreno, y como
responsable de arte mantuvo vivo ese espíritu y esa estética.
P.
Cuando colaborabas en El Cocodrilo eran tiempos en los que la
Constitución estaba reciente. Ahora celebramos el aniversario de aquello
¿qué diferencia ves entre el humor de El Cocodrilo y el que se
hace ahora?
R.
Apareció a mediados del año 1984. A pesar de eso, la libertad de prensa
era aún algo light, como lo indica que sufriera varios
secuestros. Esto ocurrió sin duda porque el cocodrilo mordía sin
miramientos y se negaba a que existiesen entidades o personalidades
“vetadas para la crítica mordaz”. En la actualidad, estas críticas
subiditas y sarcásticas no evitan ni sorprenden a nadie y las
publicaciones de hoy en día no viven temerosas de si serán secuestradas
nada más salir a la calle.
P.
Sí, pero extiéndete sobre El Cocodrilo, por favor. Quién la
dirigía y cómo, qué se pretendía con la publicación, cómo funcionó,
quiénes eran tus compañeros de viaje…
R.
El Cocodrilo se autodefinía como “semanario satírico
impertinente”. Su alimento preferido era quien ejerciese cualquier tipo
de poder. Siempre estaba al acecho para practicar sobre ellos una
crítica voraz y veraz, con el humor que ello le permitiese, y tal era su
compromiso de “no casarse con nadie”, que no admitía publicidad en sus
páginas, aunque eso le llevara a subsistir únicamente de “las ventas” (y
no me estoy refiriendo a la plaza de toros). A pesar de ello, llegó al
número 113.
El
verdadero alma del saurio era su editor, Eugenio Suárez, razón por la
que no le duraban mucho sus directores, engullidos sin compasión y con
nombres como Andrés Vázquez de Sola, Rafael Martín Alonso, Jesús
Infante, Alfonso Ussía, “Eduardo Sotillo”, ejerciendo, mientras, como
directora en la sombra Raquel Actis. Y finalmente, hasta su cierre,
Carlos de Vega.
El entrecomillado anterior responde a que
Eduardo Sotillo no era
periodista, era cinturón negro de Judo.
Eugenio Suarez no sabía como llamar
la atención sobre la publicación, y para ganarse publicidad gratuita y
en una de las comidas que hacíamos semanalmente, se le ocurrió localizar
a alguien que se llamara como algún miembro del gobierno y proponerle
figurar como director, eximiéndole de toda responsabilidad. Casualmente,
yo conocía a un "Eduardo Sotillo", compañero judoka del gimnasio,
ofreciéndome para mediar y llevar a cabo la burla. Y dio resultado, pues
tras aparecer los nuevos créditos, la prensa abordó al entonces portavoz
del gobierno "Eduardo Sotillos", para preguntarle si era él el nuevo
director de El Cocodrilo...
Por increíble que parezca, su nombre [el de la publicación] se debía a
un verdadero cocodrilo que se encontraba en una gran pecera, en la
redacción, y que terminó siendo donado al zoológico de Madrid. Las
plumas que lo engalanaban (ahora me estoy refiriendo al de papel),
llevaban la firma de Jimmy Giménez Arnáu, Jesús Hermida, Santiago Amón,
José Luis de Vilallonga, Alfonso Ussía, Amando de Miguel, Miguel Angel
Gª Juez, Pgarcía, Manuel Funes Robert, Emilio G. Sánchez-Montero, José
Luis Souto y muchos más. Y mis compañeros de viñetas fueron genios de la
talla de Antonio Mingote, Manolo Summers, Chumy Chumez, Santiago
Almarza, Ramón, Jesús Zulet, Cabañas, Madrigal , Cabezas, Kuto y algunos
otros.
[ véase fotografía de algunos de estos humoristas
en galería anexa a esta página ]
P. Tú conociste a Chumy Chúmez… ¿Consideras que él fue una de las
piezas fundamentales de la transición del humor que tuvo lugar entre una
época regida por el humor de La Codorniz hasta una en la que
comenzaron a destacar publicaciones como Hermano Lobo, El Papus y
El Jueves?
R.
Nuestro recientemente desaparecido Chumy tiene reservado un lugar
destacado entre los genios del humor gráfico en España.
Era incisivo pero a la vez tan tierno que cuando le gustaba un chiste
para él no era bueno, él decía que era “bonito”.
Desde La Codorniz, a la que siguió Hermano Lobo (donde
debuté), más tarde El cocodrilo Leopoldo, después El Cocodrilo
(su secuela) y últimamente La Golondriz, descendiente de la
primera y revivida por el incansable Pgarcía desde la Academia de Humor,
todas ellas tienen un profundo aroma a Chumy. Y aunque El Papus y
El Jueves tomaran un camino distinto, su estilo tan personal ha
sido siempre un referente para cuantos humoristas gráficos hemos llegado
después.
P.
Durante los años ochenta estuviste ligado al mundo de la animación, por
ejemplo con la serie de dibujos animados de producción nacional Don
Quijote de la Mancha. ¿Cómo cambiaste de registro; te sirvió la
animación para dominar
mejor el humor gráfico?
R.
Sin duda alguna. Todo cuanto he hecho me ha servido de experiencia,
incluso he montado en globo... (sólo eso).
Desde que en la editorial trabajaba con la cuatricromía e indicaba
tramas y opacos a la fotomecánica, las mezclas de color no tienen
secretos para mí. En Artes y Oficios aprendí a dibujar con multitud de
materiales. Con el dibujo animado, en el departamento de Layout, la
fidelidad de los personajes debe ser óptima, el estilo, las proporciones
de cada uno y entre ellos, su ubicación en el fondo en el que se mueven,
el movimiento que desarrollan en cada plano...
He
realizado trabajos de especialidades muy variopintas, pero eso es
precisamente lo que me ha permitido dominar tan diferentes estilos.
P.
En referencia a tu parte en PareJA... ¿Cómo se trabaja con un guionista?
R.
Nos presentó un amigo y compañero mutuo (Ramón, el humorista gráfico).
Se acababa de disolver “Isidro”, del que él era el guionista, y
necesitaba otro dibujante para formar una nueva “PareJA” (ya que él no
dibuja) y continuar así la colaboración existente con Europa Press.
Acepté limitarme a hacer sólo el dibujo, y aunque al principio me
resultaba un tanto extraño dibujar sobre una idea que no fuese mía,
terminamos amoldándonos de tal forma que así llevamos 10 años.
El
dibujante siempre tiene la posibilidad de enriquecer una idea. Además,
de este modo, cada uno pone el 100% de su capacidad en que en su parte
de responsabilidad se consiga el mejor resultado. Debe ser una buena
fórmula, cuando hay tantas parejas (aunque PareJA sólo una) en el
panorama gráfico de humor. Por otro lado, eso para mí no representa
ninguna traba, para continuar con mis propios trabajos y chistes, que
sigo haciendo para diferentes medios.
P.
¿Cómo se trabaja para una agencia como Europa Press? ¿Condiciona de
algún modo el tipo de humor por no saber exactamente a qué medios
concretos se va a dirigir o se modula el enfoque genérico del chiste,
por ejemplo?
R.
El hecho de que nuestro chiste aparezca en unos diez diarios de muy
diferentes puntos de España y que, por lo general, cada uno cuente con
un humorista autóctono que aborda noticias de su provincia o región,
todo eso nos lleva a que el nuestro trate temas de actualidad nacional e
internacional, sin color ni inclinación, donde en cada momento cada uno
se lleve lo que se merece por méritos propios. Y como ahora vosotros,
pacientes y cansados lectores os habéis merecido un descanso, ya termino
mi parrafada y me pongo a dibujar, que es lo mío. Hasta pronto.
T:
Gracias, José Julio.
[ ver la galería de imágenes ]
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