EL MUCAHI Y EL RESCATE DE LA HISTORIETA MEXICANA |
Portada de El Metiche nº 2 (1985). |
Antes que nada permítanme presentarme. Quien escribe estas líneas, servidor de todos ustedes, es uno más de los admiradores de la historieta. Soy caricaturista, publico mis caricaturas, esencialmente políticas, desde 1975 en diferentes medios nacionales y locales. En noviembre de 1985, en mi natal Estado de Morelos, fundé una revista junto con algunos colegas a la que bautizamos como El Metiche, subtitulada como “La primera revista de humor morelense”. Esta revista dejo de publicarse un año después.
En septiembre de 1993, El Metiche renació en una segunda época con una periodicidad más consistente, de manera que hacia 1999, en ocasión de su sexto aniversario, organizamos un homenaje a dos de los dibujantes más importantes de la historieta mexicana: Sixto Valencia Burgos y Ángel Mora Suárez, creadores gráficos de Memín Pinguín y Chanoc, respectivamente. El evento se verificó el 29 de octubre en la Casa de la Cultura de la ciudad de Cuautla.
Cartel del homenaje a Ángel Mora, Sixto Valencia y Daniel López con motivo del sexto aniversario de El Metiche. |
El otro cuautlense homenajeado, Ramiro Zittle, había trabajado dibujando para la editorial La Prensa, donde dibujó el Sargento Furia y El Halcón Negro, entre muchísimas más historias.
A este primer evento dedicado a la historieta asistieron varios artistas más, entre ellos Daniel Benítez, creador de Condonman, y los hermanos Rodolfo y Rene Anrrubio, colaboradores de la revista Samuray, de la editorial Vid. Ese memorable día de octubre de 1999 también estuvieron Alfredo Tenorio, dibujante del Hombre Invisible, y Mario Garcés, colaborador del equipo del gran Grabriel Vargas creador de La familia Burrón. La celebración incluyó la entrega de reconocimientos a cada uno de los artistas y una gran exposición de historietas y dibujos y pinturas originales.
II. Nace el Mucahi
Al finalizar el evento citado, los artistas asistentes nos donaron varios originales, que al momento pensé que eran dignos de un museo de la historieta. Investigué si existía uno en el país, y comprobé que, para desgracia de México, no existía tal recinto.
Hable con varios de los patrocinadores de mi revista y les propuse que me apoyaran para rentar un local, para que fundáramos el museo que tanto necesitaba México. Con la ayuda económica de varios de ellos, en mayo del año 2000 renté un espacio que era ideal para el propósito. Un gran salón, que formaba parte de la casa que ocupó el generalísimo insurgente don José María Morelos y Pavón, durante su estancia en la defensa del ataque y sitio de Cuautla, perpetrado por don Félix María Calleja del Rey en 1812.
El 2 de diciembre de ese mismo año, después de una ceremonia de homenaje en el zócalo de la ciudad de Cuautla, los maestros de la historieta Joaquín Cervantes Bassoco, creador de Tawa, Wama, Pies planos y el Pirata Negro; Antonio Gutiérrez, creador gráfico de todos los personajes de Lágrimas y risas, y Rubén Lara y Romero, creador gráfico de Fantomas, cortaron el listón inaugural del primer museo especializado en historieta de todo México.
Dos momentos de la inauguración del museo (2-XII-2000). |
Fue grande la lista de historietistas que aportaron obra original para la exposición inaugural del Museo de la Caricatura y la Historieta, entre ellos, Ángel Mora, Sixto, Valencia, Ramón Valdiosiera (decano de los historietistas mexicanos), Zenaido Velázquez (expresidente de la Sociedad Mexicana de Historietistas), Jorge Aviña (portadista de El libro vaquero y La novela policiaca), Benjamín Orozco (colaborador de Joaquín Cervantes Bassoco), Rodolfo Pérez Garduño, Olivia Soto, Juan Alba (creador grafico de El Pantera) y muchos otros compañeros más.
III. Bautizo del Mucahi con el nombre de Joaquín Cervantes Bassoco
En 2008, falleció Joaquín Cervantes Bassoco. En su honor, en el octavo aniversario del museo, el Mucahi adoptó el nombre de Museo de la Caricatura y la Historieta Joaquín Cervantes Bassoco, con el generoso consentimiento de su viuda, la señora doña Catalina López Mora. Acotamos que el Mucahi tiene en resguardo más de mil dibujos originales de las obras del maestro Cervantes Bassoco.
Joaquín Cervantes Bassoco, autoretratado en la portada de Tawa nº 500 (28-IV-1969). | Una página de historieta de Tawa |
IV. Financiamiento del Mucahi
Cartel promocional de la agrupación "Amigos del Mucahi Bassoco". |
Otra parte de los ingresos para sostener el museo se obtiene de la venta de publicaciones digitales derivadas del estudio y análisis del material que conforma su acervo. Entre ellas están: Un paseo por la historieta mexicana (libro publicado también en Argentina por La Bañadera del Cómic), Historietas de horror en México, Germán Butze, un Chamaco de 100 años, y Elia D´Erzell, la dama generosa de la historieta mexicana.
Portadas de las cuatro publicaciones digitales mencionadas. |
El Mucahi, nacido en la ciudad de Cuautla, actualmente tiene su domicilio en el pueblo de Anenecuilco, Morelos, a poca distancia de la casa museo donde naciera el caudillo campesino revolucionario Emiliano Zapata Salazar.
V. El rescate permanente de la historieta mexicana
En este 2015 se están cumpliendo quince años de actividad permanente del Mucahi. En ese largo recorrido hemos hecho contacto con varios historietistas y sobre todo con familiares de historietistas que ya han fallecido. Estos nos han proporcionado información valiosa que procuramos, con nuestros modestos medios, poner a disposición del público estudioso y admirador de la historieta.
Es así como hemos podido rendir homenaje en nuestras diferentes celebraciones de aniversario a (cito entre paréntesis sus creaciones más importantes): Leopoldo Zea Salas (primer dibujante de Kalimán), José Suárez (Alma Grande), Pedro Zapiain (Chanoc, Alma Grande, Balam), Francisco Ortega (Libro vaquero), Guillermo Mendizábal Lizalde (fundador de Editorial Posada), Armando Anguiano, Óscar Basaldúa, Sealtiel Alatriste, Guillermo de la Parra, José Cabezas (Hermelinda Linda, Aniceto Verduzco), Óscar González Guerrero (Hermelinda Linda), Susy Romero, María Luisa López, Laura Bolaños, Jorge Rodríguez, José Luis Durán (El Hombre Araña), Héctor García (Los bandidos de Río Frío), Zenaido Velázquez, Héctor Macedo (Poncho López, Aventuras Viruta y Capulina), Óscar González Loyo (Karmatron), Rafael Viadana, René del Valle (Kalimán), Roberto Castro (El Hombre Araña), Joaquín Mejía (Hermelinda Linda), Vicente Samperio (Por Favor), Antonio Monroy, Rafael Márquez (Libro vaquero), Federico Antonio Velázquez Fraga, Gustavo Galán (Tradiciones y leyendas de la Colonia), Germán Butze (Los supersabios), Daniel Muñoz y Juan Alba (El Pantera), Gregorio Grande (Hermelinda Linda), Carmen y Guadalupe Hernández (Libro semanal), Jorge Pérez Valdez (Grandes novelas), Constantino Rábago (Relámpago), Susana López Ávila (Libro vaquero), Ángel Almazán Cervantes (Wama, El Pirata Negro). De manera que la celebración de cada aniversario del Mucahi Bassoco se ha convertido en una de las reuniones más importantes de artistas, escritores y dibujantes de la historieta mexicana.
Tres carteles de las celebraciones de aniversario del museo. |
VI. Historieta y patrimonio cultural
En diciembre de 2014, en el marco de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, fuimos invitados a participar en el Encuentro Internacional de Caricatura e Historieta. Impartimos una conferencia en la que abordamos el tema “Historieta y patrimonio cultural”.
Con esa participación iniciamos una campaña tendente a sensibilizar a la sociedad para que brinde el justo reconocimiento a la historieta mexicana, particularmente la producida en el siglo XX, como una parte importante del patrimonio cultural.
En la conferencia expusimos que era impostergable ponderar el legado de la historieta en la formación cultural de sus lectores, pues es bien sabido que tuvo una amplia distribución tanto en México como en Centroamérica, Sudamérica, las regiones hispanohablantes de Estados Unidos y España.
El propósito del Mucahi a corto plazo es iniciar un movimiento social que propicie que el Estado mexicano decrete, con las formalidades que lo ameriten, que la historieta mexicana es parte fundamental de nuestra cultura y de nuestra historia, y derivado de ello pueda dotar a México de un museo digno de la historieta mexicana, así como el establecimiento de un organismo que lo administre y gestione fondos para la adquisición de acervos que ameriten su preservación.
Tres de las historietas más populares de México: El Tilico, Chanoc y Memín Pinguín |
México está en deuda con su historieta. Hubo un tiempo en que sus valores artísticos contribuyeron a la formación cultural e intelectual de la niñez y juventud mexicana, con la generosidad de un misionero. Hoy es parte de nuestra historia y símbolo de identidad nacional. Corresponde a la sociedad actual y a su representación social y política garantizar su preservación, conservación y difusión, de manera que sea un punto de referencia para los actuales y futuros artistas generadores de la creación gráfica y literaria, que ha identificado a nuestro país.
Desde el Museo de la Caricatura y la Historieta consideramos que el reconocimiento pleno de nuestra historieta como parte del patrimonio cultural nacional con toda seguridad dará pie a otro movimiento de carácter continental, pues, desde ya, muchos ciudadanos de otros países hermanos consideran a la historieta mexicana como integrante del patrimonio cultural de una parte importante de la humanidad.
El próximo 20 de diciembre se verificará la ceremonia del XV aniversario de este peculiar museo. El programa está pleno de sorpresas y logros, pues incluye, en primer lugar, la inauguración de las nuevas instalaciones que albergan su acervo y sus exposiciones, ubicadas en el nuevo edifico de la Casa de Cultura del pueblo de Anenecuilco, y en segundo lugar la presentación de la asociación civil que respalda jurídicamente al Mucahi Bassoco (Movimiento Cultural Coronel Francisco Franco Salazar, A. C., fundada para tal efecto el 23 de marzo del presente año). Todo esto aunado al homenaje a los fundadores y donadores de los materiales que resguarda el Mucahi.
La nueva etapa del museo incluye la realización de las acciones y gestiones necesarias para equipar su sede de manera que cuente con adecuadas instalaciones (mamparas, iluminación, etc.) que permitan la preservación adecuada de sus fondos, así como la presentación digna, agradable y didáctica de las colecciones. Como se ve, hay mucho que celebrar, de manera que están todos invitados a participar en la gran fiesta del decimoquinto aniversario del Mucahi Bassoco.